1. La actividad industrial en un mundo globalizado Como el resto de los sectores productivos, la industria se ha visto afectada por los procesos de globalización económica. Desde el punto de vista de la industria española, han sido fundamentales en este sentido dos procesos: los cambios de la Tercera Revolución Industrial y la incorporación a la Comunidad Europea. Los cambios de la tercera revolución industrial Son los producidos a raíz de la crisis de 1973. Aunque ésta suele identificarse con el episodio coyuntural de la subida de precios del petróleo, en realidad se trató de una crisis estructural mucho más profunda. Como consecuencia de la misma, la economía internacional sufríó grandes transformaciones:
Incorporación masiva de innovaciones técnicasen torno a dos sectores: la microelectrónica y las comunicaciones. Sus aplicaciones son muy variadas: informática, telecomunicaciones, biotecnología… Junto con los sectores de nuevos materiales, nuevos medios de transporte y las energías renovables, constituyen las industrias de alta tecnología. Cambios en el sistema de producción, principalmente los dos siguientes: Descentralización: El proceso productivo se segmenta en diferentes fases que pueden localizarse en establecimientos separados. La descentralización puede realizarse en diferentes factorías de la misma empresa.
-Flexibilización de la producción: adaptación a la demanda mediante la fabricación de pequeñas series.
(1.2)Cambios en el tamaño de las empresas: Hoy, lo esencial es la capacidad de las empresas para atender una demanda diversificada y cambiante, lo que resulta más fácil en unidades productivas pequeñas y medianas. Cambios en el empleo industrial: -Aumento de la cualificación y terciarización del empleo: se reducen las tareas ejecutadas por trabajadores manuales mientras aumentan las tareas de servicios a la producción que constituyen el llamado empleo de cuello blanco. -Desregulación del mercado laboral: se reduce el número de trabajadores fijos, con condiciones de trabajo reguladas en los convenios colectivos y aumenta el empleo precario y con menos derechos laborales.
Nueva división internacional del trabajo. A los países industriales tradicionales, hay que añadir ahora los nuevos países industriales: Brasil, Sudáfrica, India, China o los llamados tigres y dragones asíáticos. El desarrollo industrial de estos países supone la deslocalización de muchas industrias de los países industriales tradicionales que se desplazan a esas áreas.
La crisis española añadió a estos cambios los problemas heredados de épocas anteriores, entre los que podemos destacar los siguientes:
(1.3)Una desfavorable especializaciónsectorial.
La industria española se concentró en actividades que exigían mucha mano de obra o que consumían mucha energía. En el primer caso hubo que hacer frente a la competencia de os nuevos países industriales asíáticos. En el segundo se ha pagado la excesiva dependencia energética del exterior.Baja productividad y escaso esfuerzo innovador. La tradición proteccionista y el minifundismo empresarial no favorecieron la mejora de equipos y procesos, con lo que la productividad por persona ocupada era inferior a la de los países de nuestro entorno. Elevado endeudamiento empresarial. Nuestras empresas dependen excesivamente de los créditos bancarios, en lugar de reinvertir más los beneficios. El encarecimiento del dinero en los años ochenta agudizó la crisis por este motivo.
El impacto del proceso de reconversión industrial fue muy duro en regiones como Asturias, País Vasco y el resto de la cornisa cantábrica, en algunos sectores de las grandes áreas metropolitanas. Las ZUR atrajeron bastantes inversiones, pero creando pocos puestos de trabajo. Más de la mitad de la inversión y el empleo creado por ellas se concentró en Madrid y Barcelona. Además de reestructurar los sectores en crisis, comienzan a desarrollarse en esta época las políticas de I+D (Investigación y Desarrollo), que intentan potenciar los sectores de mayor intensidad tecnológica. En España la inversión en I+D es todavía baja.
(1.4)La integración en Europa.
Los principales efectos de la integración en Europa en el sector industrial han sido los siguientes: Un gran aumento del volumen de comercio de productos industriales entre España y la UE, comercio en el que seguimos teniendo déficit. La llegada de capitales europeos a la industria española. La exigencia de mayores controles medioambientales. Una progresiva homogeneización de las políticas económicas: eliminación de los monopolios estatales, de las ayudas a las empresas, etc. Mayor accesibilidad a las innovaciones técnicas.
2- factores de localización industrial
La actividad industrial de un país está condicionada por múltiples factores: disponibilidad de recursos naturales y mano de obra, estrategias políticas… Tradicionalmente, se han considerado factores favorables para la localización industrial los siguientes.La proximidad a las materias primas. La proximidad a las fuentes de energía. La proximidad a los mercados de consumo. La existencia de buenos sistemas de transporte y buenas redes de comunicaciones. La presencia de mano de obra abundante, barata y bien cualificada.
(2.1)Todo ello dio lugar a la creación de grandes aglomeraciones urbano – industriales. Junto a las industrias principales, surgieron industrias auxiliares, empresas de servicios, etc. Además, la gran ciudad suministra mano de obra cualificada y ofrece un amplio mercado para las ventas. Son las ventajas de las llamadas economías de aglomeración, que predominan en la industria hasta el último cuarto del Siglo XX. En los últimos 30 años han cambiado las pautas de localización, ganando importancia nuevos factores: Pierden importancia la proximidad a los recursos naturales y al mercado por la mejora de los transportes y las comunicaciones. Mantienen su importancia la disponibilidad de buenos sistemas de transporte y comunicación y la de mano de obra. Aparecen nuevos factores que atraen a las industrias:
El acceso a la innovación y la información. Las ventajas competitivas aportadas por el territorio: mano de obra, infraestructuras… Como consecuencia de lo anterior, se dan hoy dos tendencias contradictorias en la localización industrial:
difusiónhacia los espacios periféricos y concentraciónen los espacios centrales. La difusión de la industria hacia espacios periféricos que hasta ahora no le resultaban atractivos tiene las siguientes causas:
(2.2)Los problemas de las grandes aglomeraciones. La concentración comienza a presentar grandes inconvenientes a partir de un punto determinado. Las carácterísticas del nuevo modelo de producción industrial. La tendencia hacia empresas de menor tamaño, la diversificación de la producción, las facilidades de comunicación instantánea que dan las nuevas tecnologías… Nuevas estrategias para la reducción de costes. En zonas periféricas o rurales, los salarios son más bajos, la conflictividad laboral es escasa, el suelo barato, etc. Desarrollo de la industrialización endógena. Algunas zonas rurales o periféricas han conseguido cierto desarrollo industrial a partir de sus propios recursos.