Formaciones vegetales en España
Vegetación de la regíón eurosiberiana de clima Atlántico: La regíón eurosiberiana se extiende por el área septentrional peninsular de clima atlántico y oceánico, desde Galicia hasta los Pirineos. El clima húmedo con precipitaciones anuales superiores a los 750 mm y sin aridez estival junto a temperaturas templadas y moderadas. Como consecuencia se desarrollan tres formaciones vegetales: (1)
bosque templado o caducifolio:(1.1) formaciones primarias (naturales) Es un bosque denso y umbrófilo con árboles de tronco recto y gran altura que compiten entre ellos por ocupar los estratos superiores y alcanzar la luz. El sotobosque, formado por arbustos y matorrales, es pobre. En él crecen los nuevos brotes de árboles y algunos arbustos. Las hojas de los árboles son planas, blandas y caedizas. El bosque caducifolio es un bosque monoespecífico y las masas forestales más carácterísticas son los robledales y los hayedos. El roble exige humedad y temperaturas templadas por lo que encuentra su óptimo ecológico en las condiciones climáticas de esta regíón, donde ocupa las zonas más bajas porque tolera mal el frío. Por encima de los 500m de altitud el roble común es sustituido por el roble albar. El haya es un árbol muy exigente en humedad que no tolera la aridez, pero su resistencia al frío hace que se extienda como un árbol de montaña (1.2) formaciones secundarias (introducidas) Formaciones introducidas por e ser humano:
el haya es una especie de hoja caduca importada del Oriente europeo. Se desarrolla sobre suelos silíceos en ambientes húmedos y templados, por lo que su óptimo ecológico está en el área atlántica.
El pino, se adaptan a las distintas condiciones climáticas y tipos de suelo de España.
El eucalipto se extiende desde Galicia por toda la Cordillera Cantábrica en la zona atlántica. Se usa en la repoblación por su rápido crecimiento y por su rentabilidad económica como materia prima de pasta para papel.(2) formación de matorral o landa: formación leñosa y densa que aparece en las zonas de suelos más pobres y sustituye al bosque caducifolio cuando este se degrada debido a la sobreexplotación o a incendios. Las especies más comunes son el tojo, el brezo, la retama y el piorno. Cuando la landa es destruida, domina una formación herbácea, los prados (3) bosque marcescente: Formado por quejigos y rebollos, es una formación de tipo atlántico pero adaptada a la aridez y resistente al frío, le permite ocupar el área más meridional de la zona atlántica de transición al clima mediterráneo. El término marcescente hace referencia al carácter semicaedizo de su hoja, que se seca en otoño pero no cae hasta el final del invierno.
bosque templado o caducifolio:(1.1) formaciones primarias (naturales) Es un bosque denso y umbrófilo con árboles de tronco recto y gran altura que compiten entre ellos por ocupar los estratos superiores y alcanzar la luz. El sotobosque, formado por arbustos y matorrales, es pobre. En él crecen los nuevos brotes de árboles y algunos arbustos. Las hojas de los árboles son planas, blandas y caedizas. El bosque caducifolio es un bosque monoespecífico y las masas forestales más carácterísticas son los robledales y los hayedos. El roble exige humedad y temperaturas templadas por lo que encuentra su óptimo ecológico en las condiciones climáticas de esta regíón, donde ocupa las zonas más bajas porque tolera mal el frío. Por encima de los 500m de altitud el roble común es sustituido por el roble albar. El haya es un árbol muy exigente en humedad que no tolera la aridez, pero su resistencia al frío hace que se extienda como un árbol de montaña (1.2) formaciones secundarias (introducidas) Formaciones introducidas por e ser humano:
el haya es una especie de hoja caduca importada del Oriente europeo. Se desarrolla sobre suelos silíceos en ambientes húmedos y templados, por lo que su óptimo ecológico está en el área atlántica.
El pino, se adaptan a las distintas condiciones climáticas y tipos de suelo de España.
El eucalipto se extiende desde Galicia por toda la Cordillera Cantábrica en la zona atlántica. Se usa en la repoblación por su rápido crecimiento y por su rentabilidad económica como materia prima de pasta para papel.(2) formación de matorral o landa: formación leñosa y densa que aparece en las zonas de suelos más pobres y sustituye al bosque caducifolio cuando este se degrada debido a la sobreexplotación o a incendios. Las especies más comunes son el tojo, el brezo, la retama y el piorno. Cuando la landa es destruida, domina una formación herbácea, los prados (3) bosque marcescente: Formado por quejigos y rebollos, es una formación de tipo atlántico pero adaptada a la aridez y resistente al frío, le permite ocupar el área más meridional de la zona atlántica de transición al clima mediterráneo. El término marcescente hace referencia al carácter semicaedizo de su hoja, que se seca en otoño pero no cae hasta el final del invierno.
Vegetación de la regíón mediterránea:
se extiende por el espacio peninsular de clima mediterráneo. Esta regíón biogeográfica se caracteriza por la aridez estival que condiciona de manera decisiva el desarrollo de la vegetación , puesto que la falta de agua durante el verano define que especies pueden adaptarse y sobrevivir. Las formaciones vegetales son (1) el bosque esclerófilo mediterráneo: (1.1) formaciones primarias: caracterizada por agrupar especies que han desarrollado variados sistemas para adaptarse a la aridez. Sus hojas son perennes, cubiertas por una membrana que reduce al máximo la evaporación. La especie más significativa es la encina, propia de la zona costera catalana. El Encinar es la formación vegetal más extendida de la Península. Su gran capacidad de adaptación permite que colonice altitudes desde el nivel del mar hasta los 2000m. El sotobosque que acompaña al encinar es complejo. No persisten encinares en estado climácico, ya que las roturaciones han dado lugar a formaciones degradadas con un estrato arbóreo pobre. La dehesa es un bosque ahuecado que combina el uso forestal con un aprovechamiento agrícola y pastoril. El sistema de dehesa permite conservar estos bosques y mantener un cierto equilibrio con el medio ambiente. El alcornoque es una especie silícola más exigente en humedad que la encina y que no soporta bien los fríos inviernos. Su principal área de desarrollo corresponde al suroeste peninsular. El algarrobo está muy presente en la provincia de Valencia y el acebuche en el valle del Guadalquivir. (1.2) formaciones secundarias: Los pinares son muy abundantes en nuestro país. Han sido introducidos desde épocas antiguas, adaptándose según subespecies a unas u otras regiones. Los pinos típicamente mediterráneos son el pino piñonero y el pino carrasco. Son heliófilos y termófilos es decir necesitan luz y calor. El pino resinero es una especie de transición que ha visto favorecido su crecimiento debido al aprovechamiento de su resina y madera. El pino silvestre es natural del centro y norte de Europa. (2) la formación arbustiva o de matorral: No corresponden a una vegetación climácica, sino a un estadio regresivo del bosque mediterráneo provocado por la actuación humana. El matorral ocupa una amplia extensión en el ámbito mediterráneo, entre las formaciones destacan : la maquia, formación de matorral esclerófila densa y cerrada. Compuesta por madroños, brezos y jaras.
La garriga es una formación menos densa, de porte más bajo y con menor variedad de especies. Dominan la jara y otras plantas aromáticas. La degradación del maquis y la garriga dan lugar a la estepa, formación de hierbas xerófilas.
Vegetación de la regíón macaronésica:
El archipiélago canario forma parte de la regíón macaronésica, donde se combinan especies mediterráneas con otras de origen tropical y atlántico. Dan lugar a una riqueza y diversidad de especies mayor que en ninguna otra parte de nuestro país, con un elevado número de endemismos y especies relictas. Fuerteaventura y Lanzarote presentan una vegetación más pobre y xeromorfa, en el resto de islas se observa un escalonamiento de la vegetación en los siguientes pisos: –
Piso basal
Altas tempeaturas y acusada aridez permiten el desarrollo de matorrales xerófilos de clara influencia africana. En las zonas costeras salinas crecen plantas halófilas como el tamarindo. –Piso intermedio:
la mayor humedad y las temperaturas más suaves hace posible el crecimiento de dos especies endémicas, el drago y la palmera canaria. –Piso montano termocanario:
el descenso térmico debido a la altura y la constante humedad determina la aparición del monteverde integrado por el bosque de laurisilva ( de gran frondosidad y de carácter perennifolio que encierra una amplia variedad de especies) y fayal-brezal (ocupa las zonas de condiciones mas adversas del monteverde) –Piso montano mesocanario:
posee una formación monoespecífica climácica y presenta aridez. –Piso de altas cumbres supracanario y orocanario:
se caracteriza por el endurecimiento climática, mayor aridez y frecuentes heladas invernales.Vegetación de ribera:
La constante humedad de los suelos asociada a los cursos fluviales configura una formación vegetal peculiar, el bosque de ribera, compuesto por especies caducifolias e hidrófilas. La vegetación se dispone en bandas longitudinales desde la orilla del río. En la orilla se instalan las especies más exigentes en humedad (alisos y sauces). Algo más alejados, chopos, fresnos y olmos, acompañado de un sotobosque. El bosque de ribera ofrece un alto valor ecológico, no solo por la variada flora, sino por ser el hábitat de millones de especies animales que no podrían sobrevivir fuera de ese ambiente. Esta formación se ha visto reducida por la actividad humana.
Vegetación de montaña:
con la altitud descienden las temperaturas y aumentan las precipitaciones. En consecuencia, le corresponde una vegetación diferente, escalonada en pisos, que se denomina cliserie vegetal: –