Geografía Agraria Española: Evolución, Retos y Regadíos

  1. Evolución de la ocupación en el sector primario: Tendencias y causas

A lo largo del siglo XX, el descenso de la población ocupada dedicada al sector primario ha sido continuo.

Observando en detalle el gráfico, el porcentaje de ocupados en el primario sólo aumenta en 1940 y esto sucedió por una situación excepcional. La destrucción de zonas industriales en la Guerra Civil (1936-39) y las difíciles condiciones de vida de la postguerra originaron una cierta “ruralización” de la sociedad española. Pasado este momento, la población ocupada en el primario decrece continuamente: la de 1980 es menos de la mitad de 1960, la de 2000, la mitad de la del 80 y la de 2010, sólo la mitad de la de 2000.

La tendencia es general en todos los países desarrollados. La mecanización de las actividades agrícolas hace que cada vez pueda obtenerse más producción con menos mano de obra.

  1. Características y problemas de la población ocupada en el sector primario

La población ocupada del primario es fundamentalmente masculina. Sólo en Galicia y Asturias, el trabajo de la mujer es importante en este sector.

Sus problemas principales son:

  • El envejecimiento: la tercera parte es mayor de 65 años. En los últimos años se ha rejuvenecido con la llegada de inmigrantes.
  • Baja cualificación, que dificulta la modernización, incorporación de nuevas tecnologías, etc.
  • El paro agrario. Es particularmente alto en el sur, donde predominan los latifundios con trabajadores asalariados.
  1. Localización de áreas de regadío y su relación con los cursos fluviales y zonas climáticas

Los principales regadíos se localizan en los cursos del Ebro, Júcar, Segura y Guadalquivir. También aparecen manchas menos extensas en el Guadiana y el Duero.

Todos se localizan en la zona de clima mediterráneo. En este clima, las precipitaciones son escasas (300 – 600 mm anuales) y existe una acusada sequía en verano. Por ello, la aportación de agua, de modo artificial, a las plantas resulta necesaria si se desea obtener mayores rendimientos de la tierra.

  1. Principales producciones agrícolas en las zonas de regadío
    • En los regadíos del interior: cereales en regadío (trigo, cebada, maíz…), forrajeras, frutales, hortalizas…
    • En los regadíos de la costa: Existe una mayor especialización de cada área: cítricos en la Comunidad Valenciana, hortalizas en Murcia, producciones variadas de invernadero en Almería, fresas en Huelva… Penetrando un poco hacia el interior, encontramos las producciones de frutales menos termófilos: pera, manzana, melocotón, etc.


  1. El regadío en la cuenca del Ebro: Áreas y canales principales

Las dos principales áreas de regadío en el Ebro son la Ribera Alta (de Navarra a la ciudad de Zaragoza) y el sur de las provincias de Huesca y Lérida.

Los principales canales que riegan estas zonas son el canal Imperial de Aragón, el canal de Monegros, el canal de Aragón y Cataluña y el canal de Urgel.

  1. El suministro de agua para el regadío en Murcia: Desafíos y soluciones

El área de regadíos de Murcia es deficitaria en recursos hídricos. Obtiene el agua que le falta de:

  • La extracción de aguas subterráneas. Este proceso se ha llevado al límite, produciéndose muchas veces la sobreexplotación de los acuíferos y la salinización de los pozos.
  • El trasvase Tajo-Segura, que cada vez encuentra más dificultades por la oposición de la Comunidad de Castilla – La Mancha al mismo.
  • Las nuevas plantas desaladoras.

El déficit de agua se agudiza cada vez más por las demandas crecientes del sector turístico (hoteles, urbanizaciones, campos de golf…), por lo que, periódicamente, las comunidades del litoral levantino reivindican un gran trasvase desde el Ebro.

  1. Uso de aguas subterráneas en el regadío: Zonas y problemas asociados

Además del área de Murcia, la otra zona donde es importante la extracción de aguas subterráneas para riego es la Mancha oriental. Los problemas que plantea su uso son:

  • La sobreexplotación, cuando se saca del acuífero más agua de la que éste recarga de modo natural. La sobreexplotación puede provocar el agotamiento del pozo y el deterioro o desaparición de humedales. Por ejemplo, en La Mancha, ha provocado graves problemas ecológicos en el parque nacional de las Tablas de Daimiel.
  • La salinización. Si el acuífero está próximo a la costa y su nivel desciende por debajo del nivel del mar, se producirá la intrusión de agua marina en la masa de agua subterránea.
  • Otras consecuencias: el descenso del nivel freático puede producir o amplificar ciertos movimientos del terreno. Por ejemplo, se ha comprobado su influencia en los efectos del terremoto de Lorca (Murcia) en 2011.

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