La meteorización y los suelos
Las condiciones en que se forman la mayoría de las rocas son distintas a las que se encuentran cuando alcanzan la superficie terrestre. Esto implica ajustarse a estas últimas para lograr un equilibrio; y es la meteorización quien hace posible la adaptación de las rocas a su nuevo medio. Cualquiera que sea el mecanismo de meteorización, su velocidad y su duración en el tiempo será un manto de alteración de espesor variable que recubrirá la roca sin alterarla.
Suelo
Depósito natural consistente en capas constituidas por minerales y/u orgánicos de espesor variable, que difieren de la roca de la que proceden en sus propiedades morfológicas, físicas, químicas y mineralógicas así como en sus carácterísticas biológicas. En el suelo hay una combinación de materia sólida inorgánica 45% y orgánica 5%, agua
25% y aire 25%. El 50% del volumen del suelo está formado por material mineral y humus, y el 50% restante es aire (oxígeno y dióxido de carbono) y agua con diversos nutrientes en disolución que ocupan los poros del suelo.
Factores que influyen en la formación del suelo
1.Roca madre o material parental: es la fuente de la materia mineral tras meteorizarse. El tipo de roca influye en la velocidad de meteorización y, por tanto, en la deformación del suelo. La composición de la roca se relaciona con la fertilidad del suelo y la vegetación que sustenta; 2. Tiempo: si un suelo se ha formado rápidamente, la composición de la roca madre será la que determine sus carácterísticas, y si este proceso se ha prolongado en el tiempo, será el clima el que deje una mayor impronta. En general, cuanto más tiempo trascurra mayor es el espesor del suelo y menor similitud con la roca madre; 3. Seres vivos: influyen en las propiedades físicas y químicas del suelo y aportan materia orgánica. La descomposición de la materia orgánica origina nutrientes y condiciona la fertilidad, además de incluir la formación de ácidos orgánicos que facilitan la meteorización, el producto final de la descomposición por parte de bacterias, hongos, invertebrados y protozoos es el humus; 4.Topografía: la longitud e inclinación de la pendiente influyen en la erosión y la capacidad de retención del agua y de la orientación de la ladera; 5.Clima: los cálidos y húmedos favorecen la meteorización química intensa y dan lugar a suelos de grandes espesores. En climas secos y de temperaturas extremas, son delgados y de escasa fertilidad.
Horizontes
1.D: formado por materia orgánica. Hay una elevada cantidad de oxígeno, dióxido de carbono y ácidos orgánicos; 2.A: contiene humus y una considerable actividad biológica, pero la materia mineral es la dominante. En la superficie o bajo un h.O.; 3.E: capa de color claro con poca materia orgánica. Se produce un lavado de materia orgánica, Fe, Al o arcilla hacia zonas inferiores; 4.B: la acumulación de arcillas provoca una mayor retención de agua. Hasta aquí alcanzan las raíces, los seres vivos. Aún son activos los procesos formadores del suelo y no quedan restos de la estructura original de la materia parental; 5.C:
horizonte mineral de carácterísticas similares al material parental, poco afectado por procesos edafogénicos; 6.R: sustrato rocoso consolidado que subyace al
suelo.
Procesos gravitacionales:
una vez meteorizadas las rocas, los productos resultantes pueden movilizarse por la acción directa de la gravedad. Ello da como resultado un amplio conjunto de procesos gravitacionales. Los sedimentos no precisan un medio de transporte fluido como el agua, el hielo glaciar o el viento, aunque a veces el agua puede facilitar dicho transporte; transfieren derrubios a zonas topográficamente más bajas, donde una corriente puede removilizarlos; ensanchan los valles y necesitan pendientes para poder producirse.
Factores que afectan a los procesos gravitacionales:
1.Agua: cuando los poros del sedimento se llenan de agua disminuyen su cohesión, lo que provoca que unas partículas puedan deslizarse sobre otras con facilidad. El agua lubrica los contactos entre partículas y añade peso; 2.Pendiente: generada por la socavación de un río, los golpes de las olas en la base de un acantilado…A partir de 40º de inclinación, las pendientes suelen ser inestables; 3.Vegetación: las plantas protegen contra la erosión y estabilizan la pendiente gracias a sus sistemas radiculares. También resguardan el terreno frente al impacto de las gotas de lluvia; 4.Terremotos: factor desencadenante adicional. Uno de los efectos que pueden provocar es la licuefacción.
Clasificación de los procesos gravitacionales:
1.Desprendimiento: caída libre de fragmentos rocosos. Para que ocurra, las pendientes tienen que ser muy pronunciadas y que se trate de paredes rocosas afectadas por fracturas. Son rápidos y destructivos; 2.Deslizamiento: ocurre cuando el volumen de material resbala sobre otro, que permanece estable en su posición original. Puede ser 1traslacional, si la masa se desliza sobre una superficie plana o rotacional, cuando la superficie de rotura es cóncava y muestra un sistema de grietas en la cabecera; 3.Flujos de derrubios: el material se mueve en forma de fluido viscoso saturado de agua. Adquiere forma de lengua o lóbulo y para que ocurra es necesario que haya una acumulación de material suelto, y un aporte de agua procedente de las lluvias fuertes o deshielo que empapen los sedimentos. Zonas de alta montaña; 4.Reptación: movimiento gradual del suelo y regolito. Se activa por fenómenos de expansión y contracción en la superficie de una ladera, causados o por un proceso de humectación y secado, o por uno de hielo y de deshielo. Movimientos lentos.
Relieves estructurales:
el modelado estructural engloba todas las formas de relieve en las que la tectónica actúa como un factor geomorfológico más: a veces origina directamente un relieve, y otras condiciona la actuación de los procesos generadores de relieve controlando el modelado resultante.
Zonas atectónicas o no plegadas
Los estratos son horizontales o presentan buzamientos muy suaves, y se originan diferentes tipos de relieves. Zonas plegadas: Áreas en donde el plegamiento ha sido simple y ha dado lugar a series monoclinales se pueden formar relieves en cuesta. Estos constan de un frente escarpado y un dorso tendido de pendiente constante. A veces, algunas capas
verticales quedan aisladas constituyendo crestas. Las zonas profusamente plegadas presentan una mayor diversidad de formas: las elevaciones pueden coincidir con los anticlinales (mont) o sinclinales (val). Si un valle fluvial sigue el eje de un pliegue, da lugar a una combe. Si es perpendicular a dicho eje, se forma una cluse. En los flancos de un pliegue, por erosión fluvial, se generan ojivas o chevrons; Zonas facturadas: Los bloques delimitados por las fallas pueden dar lugar a elevaciones (horst) y hundimientos (graben).
Relieves litológicos:
influenciados por la naturaleza de la roca que los compone. En ocasiones son las rocas, al formarse, las que constituyen relieves con geometrías determinadas (volcanes). Otras, son el resultado de la interacción específica de una roca con los agentes y procesos geológicos externos, que dan lugar a morfologías carácterísticas. Dentro de este segundo tipo se engloban los relieves graníticos y kársticos.
Relieves volcánicos:
Son el conjunto de morfologías que dependen de la actividad magmática eruptiva. Este rasgo restringe la distribución geográfica de estos relieves a zonas muy concretas de la superficie terrestre (zonas de acrecíón y subducción, vulcanismo intraoceánico e intra continental), asociadas especialmente a áreas de rift. En regiones donde el vulcanismo es un proceso del pasado, pueden encontrarse aún vestigios residuales, más o menos degradados pero de cierta entidad.
Morfologías volcánicas: 1
Conos o domos: formados por sucesivos aplanamientos, alrededor del foco emisor ::::
Relieves graníticos:
engloban todas las formas del relieve carácterísticas de las rocas magmáticas intrusivas. Son morfologías modeladas por los agentes geológicos externos, pero con un marcado control litológico. Su máximo desarrollo se observa en los granitos. Su origen son los modelados diferenciales, que se forman tras una meteorización y erosión selectivas; la meteorización, predominantemente química, genera un manto de alteración que la erosión evacúa posteriormente.
Variables que controlan el granito:
1.Composición mineralógica: Condiciona el tipo de meteorización y velocidad a la que se produce; 2.Textura: La roca será más resistente a la erosión cuanto mejor se ajusten entre sí los cristales que la forman. Una textura idiomorfa, menos granuda y porosa, la hará menos susceptible a la erosión. 3.Fracturación: Influye en la profundidad que alcanza la meteorización dentro del macizo rocoso. Si las fracturas son escasas y están espaciadas, disminuirá el alcance de la meteorización. Estas definen la presencia de unas zonas arenizadas y otras con roca fresca. La arenización alude al material granítico alterado, pero todavía no está erosionado. Esa arena residual o grus es altamente susceptible a la movilización por la lluvia o por corrientes superficiales de agua.
Relieves kársticos (litológicos): dentro de estos relieves se incluyen las morfologías desarrolladas en rocas solubles como los carbonatos (calizas y dolomías) o los
sulfatos (yeso o anhidrita). En los paisaje kársticos, el agua realiza un complejo viaje que comienza con el acceso al macizo rocoso (zona de infiltración), continúa el recorrido del mismo por redes de conductos y cavidades y sale de nuevo al exterior a través de surgencias (zonas de emisión).
La química de Karst: los relieves kársticos poseen una base esencialmente química. La reacción de disolución es un proceso clave. En el caso de la caliza, esta es la reacción que lo controla: CaCO3+ H2O + CO2→ 2(HCO3)- +Ca2+ ó H2CO3 + CaCO3 → Ca (CO3)2
La capacidad de disolución del agua de esta reacción aumenta si se acidifica. Esto ocurre porque el agua de lluvia o nieve incorpora dióxido de carbono atmosférico en su trayecto a la superficie terrestre; o porque el dióxido de carbono de origen biológico se disuelve en el agua conforme atraviesa el suelo hacia la roca subyacente. H2O + CO2 → H2CO3 El proceso es reversible. Cuando el agua está saturada, y en determinadas condiciones físico-químicas, ocurre la precipitación del carbonato de calcio.
Factores condicionantes del Karst: la roca caliza es escasamente porosa. La progresión del agua a través del macizo rocoso precisa de una red de discontinuidades, como superficies de estratificación y fracturas por las que circular. A medida que el agua atraviesa la roca se va saturando de carbonato y perdiendo capacidad de disolución. Se trata de un ejemplo muy evidente de interrelación entre las cuatro esferas que componen el sistema Tierra. Topografía: Relieves de escasa pendiente favorecen la infiltración del agua y su acceso al interior de la roca. En zonas de fuertes pendientes predominará la escorrentía superficial; Clima: Las precipitaciones condicionan la disponibilidad de agua para la disolución en superficie y la infiltración.El frío aumenta la agresividad del agua y el calor la precipitación de la calcita, tanto en el interior de la roca (cavidades) como en puntos de emisión de agua subterránea (surgencias); Litología y estructura. No todas las rocas solubles tienen idéntica susceptibilidad a la disolución. Importan la textura y la presencia de elementos. La existencia de fracturas es determinante a la hora de favorecer la infiltración del agua. Si el karst afecta a rocas plegadas, la geometría de los pliegues influirá en el desarrollo espacial del mismo; Suelos y vegetación: Si el agua atraviesa un suelo espeso y con abundante vegetación, disolverá más dióxido de carbono a su paso y será más ácida. En zonas de roca desnuda, la acidez del agua es generalmente menor.
Morfologías kársticas:
El karst presenta dos ámbitos claros de desarrollo: el de la superficie o exokarst y el subterráneo o endokarst. Uno de los rasgos más llamativos del karst es el desarrollo de cuevas. Las posibilidades en cuanto a forma, diámetro y longitud del conducto son inmensas. También lo son los posibles rellenos sedimentarios que pueden encontrarse en su interior, así como el grado de actividad de los procesos morfogenéticos que aloja.El desarrollo de un sistema endokárstico puede superar holgadamente los mil metros, entre la boca superior y la salida más baja, y el centenar de kilómetros, en su entramado de
galerías y pozos.
Formas y depósitos exo y endokársticos: 1.DOLINAS: Depresiones de planta circular y profundidad variable. Pueden aparecer aisladas o formando campos de dolinas. 2.UVALA: Solapamiento de dos o más dolinas. 3.LAPIACES: Regueros formados por la disolución del agua circulando por las rocas en pendiente. Los que se desarrollan bajo el suelo adquieren contornos redondeados. 4.SIMA: Entrada a una cavidad consistente en un conducto vertical. 5.GALERÍA: Tramo horizontal de una cueva. Su sección tiende a ser circular (tubo freático), pues esta es la forma que confiere el agua circulando a presión. Cuando esta ya no rellena por completo el tubo, la erosión provoca una incisión encajada en el fondo (conducto vadoso). 6.POLJES: Son grandes depresiones de morfología en planta variable. Se inundan estacionalmente y el agua acaba filtrándose por un sumidero o ponor. Presentan en su fondo un relleno de arcillas de descalcificación. 7.SURGENCIAS MANANTIALES O FUENTES: Puntos por los que el agua abandona el endokarst y accede de nuevo a la superficie. Se forman allí donde la disolución kárstica alcanza el nivel de base fluvial, o cuando topa con una formación rocosa impermeable subyacente. 8.BARRANCOS FLUVIOKÁRSTICOS: Valles fluviales estrechos, con una morfología mixta fluvialkárstica y delimitados por grandes paredes verticales de roca. En su fondo aparecen marmitas de gigante, caos y oscuros, bloques empotrados, etc.Pueden transportar agua en superficie de manera permanente o solo en el caso de fuertes lluvias. 9,10,11. ESPELEOTEMAS: Depósitos químicos formados en las cuevas por precipitación. Si crecen desde el techo hacia el suelo se llaman estalacitas, y si lo hacen en sentido opuesto estalagmitas. Cuando ambas confluyen forman una columna. 12 y 14. SALAS Y POZOS: Las salas son grandes espacios subterráneos que confluyen con otros conductos o quedan abiertas, a favor de cruces de fracturas. Los pozos son tramos verticales que conectan dos galerías. Pueden tener centenares de metros y diámetros muy variados.13. DEPÓSITOS DETRÍTICOS: Pueden ser autóctonos, cuando el material procede de la propia cavidad y es transportado por cursos de agua internos o asociados a desprendimientos desde el techo o las paredes de la cueva. Los alóctonos entran a la cueva desde el exterior, a través de ríos que penetran en la cavidad.