Evolución del Sistema Urbano Argentino: Desde la Colonia hasta la Industrialización

La Formación y el Crecimiento del Sistema Urbano Argentino

Orígenes Coloniales

Las principales ciudades argentinas se fundaron durante el período colonial. Estas áreas tenían una posición periférica en la organización territorial del imperio español en América del Sur, cuyo centro era Lima, Perú.

La ocupación española se inició en el siglo XVI, a partir de tres corrientes colonizadoras:

  • Corriente directamente de España: a través del Océano Atlántico y el Río de la Plata. Fundó Buenos Aires, Asunción, Santa Fe y Corrientes.
  • Corriente del Alto Perú: atravesó la región de Tucumán (abarca norte y centro de Argentina). Fundó Santiago del Estero, Tucumán, Córdoba, Salta, La Rioja, Jujuy y Catamarca.
  • Corriente de Chile: se instaló en Cuyo. Fundó Mendoza, San Juan y San Luis.

Las Ciudades en la Colonización

Las ciudades fueron un elemento central en la estrategia territorial de la Corona española para la colonización de América. Cada ciudad tenía jurisdicción sobre un territorio. Estas jurisdicciones fueron el origen de varias provincias argentinas.

Hacia principios del siglo XVIII, las áreas importantes económicamente eran las que tenían contacto con el Perú y el Alto Perú (noroeste argentino, Paraná y Uruguay). También la región de Cuyo, la cual tenía vínculos comerciales con Chile y el puerto de Buenos Aires.

Transformaciones del Siglo XVIII y XIX

El esquema presentó transformaciones en el siglo XVIII. Hubo una decadencia en Misiones debido a la expulsión de los jesuitas. Mientras tanto, crecía Buenos Aires, beneficiada por el comercio libre y por el rol de capital del Virreinato del Río de la Plata.

A partir de la Revolución de Mayo, se desintegró el antiguo virreinato. A partir de diferentes procesos, Paraguay, Bolivia y Uruguay se convirtieron en repúblicas independientes. En 1820, se disolvió el gobierno central de las Provincias Unidas y, durante años, las provincias se convirtieron en independientes, con gobiernos y ejércitos propios.

Las guerras de independencia y conflictos civiles desarticularon las relaciones comerciales de las regiones del antiguo Virreinato. Mientras tanto, Buenos Aires fue consolidando su poder económico, basado en riqueza ganadera y rentas portuarias.

Transformaciones en el Período Agroexportador

Después de la caída de Rosas, las provincias se integraron al sistema federal establecido por la Constitución de 1853, aunque Buenos Aires se mantuvo al margen de la confederación durante 10 años. En 1862, se reformó la constitución y el país quedó bajo la hegemonía de Buenos Aires. En 1880, se federalizó la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y hubo una estabilidad institucional.

En 1930, tras un golpe militar que derrocó al presidente Yrigoyen, se dio inicio a la alternancia de gobiernos constitucionales y dictaduras. Durante este período hubo un acelerado crecimiento económico basado en la producción de productos agropecuarios (carne, trigo y lana).

Para que esto fuera posible, las clases dirigentes tenían que resolver dos cuestiones: el orden y el progreso. Para lograr el orden era necesario garantizar las condiciones políticas y sociales para implementar un modelo de desarrollo económico. Esto se resolvió con la federalización de la Ciudad de Buenos Aires a partir de un acuerdo entre los grupos dirigentes de Buenos Aires y el Interior.

La cuestión del progreso implicaba la provisión de los factores básicos de producción (tierra, trabajo y capital) para que ese desarrollo fuera posible.

  • La tierra se obtuvo mediante la expansión de la frontera agrícola a partir de la Conquista del Desierto. A través de la acción militar, el Estado se apropió de extensos territorios que estaban en manos de los indígenas. La propiedad de esas tierras quedó en manos de familias, lo cual contribuyó a consolidar un grupo social (oligarquía terrateniente).
  • El trabajo fue aportado por mano de obra inmigrante (origen europeo).
  • La implementación de la educación pública, gratuita y obligatoria cumplió un rol principal para integrar la multitud heterogénea en la economía y sociedad argentina, fomentando un sentimiento de lealtad a la Nación.

El capital que financió al Estado y a las grandes obras de infraestructura provino de Gran Bretaña. Esta inversión fue importante en áreas del sistema de transporte (puertos, ferrocarriles) que hacían posible la exportación de los productos e importación de bienes. Las tarifas diferenciales y los bajos aranceles de importación desalentaron la producción industrial local.

Crecimiento Acelerado de las Ciudades

El desarrollo de la economía agroexportadora produjo grandes transformaciones en la organización económico-territorial de la Argentina y en la población. La población creció debido a la inmigración.

La concentración de la tierra agrícola en pocos propietarios condicionó la distribución de los inmigrantes, quienes al no tener acceso a las tierras se concentraban en el Litoral. Hacia 1895, el 25% de la población era extranjera, y en Buenos Aires un 50%.

Debido a que la producción primaria se concentraba en la región Pampeana, esta tuvo un crecimiento demográfico, debido a la inmigración, mientras que en el resto del país fue solo vegetativo. Las grandes ciudades del Litoral crecieron más que las ciudades del Interior (la población de Buenos Aires aumentó un 25% más).

Contexto Sociopolítico de 1930-1976 e Industrialización

A partir del golpe militar en 1930, se implementaron políticas conservadoras que querían restablecer el orden político. A partir de 1955 se desarrolló un período de inestabilidad política, el cual desembocó en la dictadura en 1976.

  • La crisis mundial iniciada en 1929 generó una reducción de la demanda de alimentos y materias primas, lo cual puso en crisis al modelo agroexportador. El Estado, para sostener los precios de los productos de exportación, intervino en varios aspectos del comercio exterior.
  • La falta de divisas dificultó la importación de bienes industriales, que aumentaron los precios. Esto estimuló un proceso de industrialización, el cual sustituyó los productos importados por nacionales. En 1943 se convirtió en política de Estado.

La primera etapa de industrialización estuvo dirigida a la producción de bienes (alimentos, textiles) para el mercado interno, en la cual los protagonistas eran pequeños y medianos capitales locales. Los salarios altos y el bajo desempleo fortalecían este mercado interno.

Este modelo económico tuvo que enfrentarse a problemas:

  • Necesidad de insumos (materias primas, energía).
  • Bienes de capital (maquinarias, herramientas) para el crecimiento de la industria nacional.
  • Estancamiento tecnológico de las industrias. Lo cual hizo necesario desarrollar una industria pesada, que requería inversiones de capital y tecnología. Para ello se recurrió a la inversión extranjera directa.

Esta dio origen a la segunda etapa de industrialización, caracterizada por las inversiones de origen extranjero orientadas a producción de bienes de capital y otras actividades.

El Estado realizó inversiones en infraestructura de transporte (rutas, puentes, autopistas), obras hidráulicas, energéticas y equipamientos sociales (hospitales, centros educativos). El período se caracterizó por la combinación de crecimiento económico con inflación, tensiones sociales y políticas.

Grandes Aglomeraciones Urbanas

Estas nuevas actividades desarrolladas se localizaron en Buenos Aires, Rosario y Córdoba. La gran concentración de mano de obra y de mercados consumidores hizo posible que se desarrollen estas actividades. Además, las ciudades contaban con transporte y actividades industriales, comerciales y servicios. En consecuencia, esto atrajo población en busca de trabajo y más actividades.

Crecimiento Urbano en Buenos Aires

El principal factor fue el comercio vinculado con el puerto. Esto estaba sujeto a restricciones legales que procuraban mantener el monopolio de Lima sobre América y España. Buenos Aires se convirtió en sede de gobernación en 1617 y en capital del virreinato en 1776.

Durante el siglo XIX, Buenos Aires tuvo varias transformaciones:

  • Construcción del puerto, trazado de los ferrocarriles, desarrollo de tranvías, obras de infraestructura, edificios públicos.
  • Federalización de la ciudad en 1880, y la organización de la municipalidad de Buenos Aires.

Expansión Metropolitana

En la primera etapa de industrialización sustitutiva, las fábricas se instalaron en CABA y en partidos cercanos de la provincia de Buenos Aires. En cambio, en la segunda etapa, las instalaciones requerían terrenos más grandes, por lo tanto, se localizaban más lejos del aglomerado (tierras más baratas y evitar congestión de áreas pobladas). Además, se aprovechaban las autopistas.

También se desarrolló un proceso de expansión suburbana acelerada (sectores obreros y empleados). Gracias a las tarifas estatizadas de los ferrocarriles, pudieron residir en zonas alejadas de sus lugares de trabajo. Todo esto facilitó el acceso a la propiedad de la tierra y vivienda (loteos baratos, créditos hipotecarios, salarios altos).

Los grupos de menos ingresos, que no tenían empleos estables, tenían menos posibilidades de tener tierras para instalar viviendas. De esta manera se empezaron a formar villas construidas con materiales precarios, en tierras fiscales, sus habitantes eran inmigrantes.

Indicadores Demográficos

  • Tasa de natalidad: cantidad de nacimientos en un año por cada mil habitantes.
  • Tasa de mortalidad: cantidad de muertes por año por cada mil habitantes.
  • Saldo migratorio: diferencia entre emigrantes e inmigrantes.
  • Crecimiento vegetativo + saldo migratorio: crecimiento demográfico (positivo o negativo).

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