Evolución y Transformación de la Industria Española

Etapa de Crecimiento (Post Plan de Estabilización)

Tras el Plan de Estabilización, la industria española experimentó una fase de crecimiento impulsada por factores externos e internos:

• Crecimiento económico de Europa Occidental: Generó excedentes de capital que se invirtieron en España, percibida como un mercado potencial con mano de obra abundante y barata.
• Aportes de capital por turismo: El auge del turismo inyectó capital en la economía española.
• Cambios en la política económica española: Apertura de la economía al exterior y priorización de la industria por parte del Estado.

Este contexto favoreció una rápida transformación de las estructuras productivas, con un auge en la fabricación de productos semielaborados en detrimento de los bienes de consumo tradicionales. Sin embargo, este crecimiento se vio limitado por:

• El peso de los sectores maduros.
• La dependencia energética, tecnológica y financiera del exterior.

Además, se observó un desarrollo espacial desigual, con una concentración industrial en Cataluña, País Vasco y Madrid, y una polarización en núcleos secundarios en el resto del país.

Crisis y Transformaciones (A partir de 1975)

A partir de 1975, el crecimiento se detuvo, dando paso a una crisis caracterizada por transformaciones en la producción y su organización. Las manifestaciones de esta crisis incluyeron:

• Cierre de empresas.
• Aumento del desempleo.
• Descenso de la aportación del sector industrial al PIB.
• Modernización de las tasas de crecimiento (aunque la productividad creció).

Las causas principales de esta crisis fueron:

• Crisis general del modelo industrial: Condiciones estructurales heredadas y coyuntura histórica.
• Impactos exteriores: Crisis energética de 1973, aumento de la competencia de nuevos países industriales y la Tercera Revolución Industrial (innovaciones tecnológicas y transformaciones).
• Rasgos económicos heredados: Especialización sectorial desfavorable (sectores maduros), estructura poco competitiva (tradición proteccionista), fuerte dependencia energética y tecnológica, y elevado endeudamiento empresarial.
• Limitaciones de la transición económica: Incertidumbre que redujo la inversión empresarial.

La crisis afectó principalmente a los sectores tradicionales. Territorialmente, se detuvo la concentración industrial, debilitándose el eje cantábrico y reforzándose los ejes del Ebro y Mediterráneo.

Política Industrial ante la Crisis: Reconversión y Reindustrialización

La política industrial se centró en dos vertientes:

• Reconversión industrial (iniciada en 1983): Buscaba asegurar la viabilidad de las industrias en crisis mediante reformas para aumentar su competitividad. Las actuaciones incluyeron ajuste de la producción, renovación tecnológica, reducción de plantilla y saneamiento financiero. Afectó a los sectores maduros y supuso el desmantelamiento de la industria obsoleta. Hubo una segunda fase en 1991.
• Reindustrialización: Promoción de nuevas actividades industriales.

Situación y Características de la Industria: La Tercera Revolución Industrial

El nuevo modelo industrial, caracterizado por la Tercera Revolución Industrial, se define por:

• Cambio tecnológico: Nuevas producciones y formas de producir, aumentando la productividad pero reduciendo la mano de obra.
• Sistema de producción descentralizado: Búsqueda de abaratamiento de costes.
• Cambio en la localización industrial: Acentuación de la división internacional del trabajo (cada parte del proceso es realizada por la empresa más eficiente).
• Concentración de capital y decisión: En pocas empresas multinacionales.

La industria española presenta problemas estructurales que dificultan su integración en este nuevo modelo:

• Composición sectorial: Gran peso de los sectores tradicionales de bajo desarrollo tecnológico.

Estructura Sectorial de la Industria

La crisis afectó de forma selectiva a los diferentes sectores. Los sectores industriales tradicionales dinámicos y de alta tecnología resistieron mejor, mientras que los sectores tradicionales estancados y consumidores de energía se vieron más afectados.

Dimensión y Propiedad de las Empresas

• Predominio de PYMEs, con la ventaja de una mejor adaptación a las demandas del mercado.
• Reducción de la participación del sector público en la producción industrial tras las privatizaciones.
• Inversión extranjera en las ramas más especializadas y dinámicas.
• Aumento de empresas españolas que se instalan fuera del país.

Inversión en I+D+i

Aunque en los últimos años se ha realizado un esfuerzo importante, la deficiente inversión en I+D+i sigue siendo un problema, generando una excesiva dependencia tecnológica del exterior.