Fuentes de Energía en España: Renovables y No Renovables
Las fuentes de energía se clasifican en dos grandes grupos: no renovables y renovables.
Energías No Renovables
Las fuentes no renovables son limitadas en la naturaleza y se agotan con su uso. Las principales son:
- Carbón: Su importancia ha disminuido progresivamente debido a los altos costes de explotación, menor rendimiento energético, la crisis siderometalúrgica, el bajo consumo doméstico y el impacto medioambiental.
- Petróleo: Históricamente ha sido la principal fuente de energía en España. Las subidas de precios obligaron a reducir su consumo, aunque en 2015 su precio descendió a niveles del año 2000.
- Gas Natural: Hidrocarburo asociado al petróleo. Se usa para generar electricidad y en usos industriales y domésticos. Representa aproximadamente el 25% del consumo energético en España.
- Energía Nuclear: Obtenida de la fisión de átomos de uranio. Genera controversia social por sus riesgos, lo que ha paralizado la construcción de nuevas centrales. Aproximadamente el 21% de la energía en España proviene de esta fuente.
Energías Renovables
Las fuentes de energía renovables son inagotables, se regeneran continuamente y tienen un menor impacto ambiental. Las más importantes en España son:
- Energía Hidroeléctrica: Fue la principal fuente de energía en España hasta el auge de la energía térmica y nuclear. Su principal inconveniente es el impacto ambiental y social (cambios en caudales, biodiversidad, desplazamiento de poblaciones). Las principales centrales se ubican en las cuencas del Norte, Duero y Ebro.
- Energía Eólica: Las instalaciones se concentran en Navarra, Aragón, Castilla y León, Andalucía y Canarias. Su producción ha crecido significativamente y ha impulsado el desarrollo de tecnología propia.
- Energía Solar: Se produce principalmente en Andalucía, Baleares y Canarias. Se utiliza para generar calor y electricidad. Su uso está en aumento, pero aún no se aprovecha todo su potencial.
- Biomasa: Se obtiene de la combustión o fermentación de residuos agrícolas, ganaderos, forestales y domésticos. Tiene un gran potencial en España debido a la importancia del sector agropecuario.
- Energía Geotérmica: Aprovecha el calor interno de la Tierra. Se usa para generar electricidad (yacimientos de alta temperatura) y para usos térmicos en diversos sectores.
La Industria en España: Evolución, Sectores y Desafíos
Empleo Industrial y Contribución al PIB
La industria española alcanzó su máximo apogeo entre 1970 y 1975. Actualmente, ocupa una posición secundaria en la estructura productiva, pero sigue siendo crucial por su impacto territorial y su influencia en el sector terciario. La producción ha crecido gracias al aumento de la productividad, las innovaciones tecnológicas y los cambios organizativos.
Clasificación de los Sectores Industriales
La crisis industrial afectó de manera desigual a los diferentes sectores. Se pueden clasificar en tres grupos:
- Sectores Tradicionales Estancados: Incluyen la industria básica tradicional (siderurgia, metalurgia, construcción naval) y la industria de consumo semiduradero (textil, calzado, electrodomésticos de marca blanca). Son intensivos en energía y mano de obra.
- Sectores Tradicionales Dinámicos: Se caracterizan por una fuerte demanda, el uso de nuevas tecnologías y la inversión extranjera. Destacan el sector automovilístico, el químico y el agroalimentario. Son competitivos, productivos y especializados:
- Sector Automovilístico: Es el más importante en España, con alta exportación y generación de empleo. La inversión extranjera es significativa.
- Sector Químico: En expansión, pero con dependencia exterior y baja inversión en I+D.
- Sector Agroalimentario: Menor inversión extranjera, aunque la presencia de multinacionales crece. Genera mucho empleo, especialmente femenino, pero enfrenta problemas por el predominio de pequeñas empresas familiares.
- Sectores de Alta Tecnología: Tienen un futuro prometedor, pero aún están en desarrollo. Dependen de la investigación y tecnología extranjeras, lo que limita su competitividad. Se localizan principalmente en grandes ciudades, como los parques tecnológicos, que impulsan la demanda de servicios y mano de obra cualificada.
Problemas Actuales de la Industria Española
El sector industrial español enfrenta desafíos estructurales que dificultan su adaptación a la Tercera Revolución Industrial. Los principales problemas son:
- Predominio de PYMES: Más del 90% de las empresas tienen menos de 500 trabajadores, lo que limita la inversión en investigación y modernización, y reduce su competitividad frente a las grandes multinacionales.
- Deficiente Inversión en I+D: Aunque ha aumentado, España aún está lejos de los niveles de inversión de los principales países de la UE. Esta inversión se concentra en sectores (automóvil, química), empresas (grandes) y territorios (Madrid y Cataluña).
- Excesiva Dependencia Tecnológica y Energética del Exterior: La baja inversión en I+D resulta en una alta dependencia tecnológica, mayores costes de producción y menor competitividad.