Natalidad y mortalidad:
El cuadro y la gráfica lineal reflejan la evolución de los indices de natalidad y mortalidad de la población española entre 1940 y 2000. También nos ofrece implicitamente, información sobre el crecimiento natural, ya que éste es el resultado de la diferencia entre el índice de natalidad y el de mortalidad. Estos datos se inicia en 1940, cuando España estaba en transición demográfica, ( desde el antiguo régimen, caracterizado por altas tasas de natalidad y mortalidad y lento crecimiento natural, hacia un régimen demográfico moderno, con bajas tasas de natalidad y mortalidad). Tampoco olvidar que la Guerra Civil concluyó en 1939 por lo que España se encuentra en plena postguera cuando esta serie se inicia.
Hay dos fases diferenciadas en la gráfica:
1º fase (
1940-1975): La natalidad desciende hasta los años por las penurias económicas que supuso la guerra y los exiliados que provocó. Sin embargo, al inicio de los 50 y durante buena parte de los 60 se incrementan los nacimientos; el “baby boom”. Son años de crecimiento y optimismo económico.
La mortalidad continuó descendiente durante este periodo. La reducción de la incidencia de los principales factores de riesgo de perder la salud, gracias a los avances médicos y sanitarios nos explican este descenso.
2º
fase (1975-2000):
Deciende la natalidad por la situación económica que siguió a la crisis de 1975, que aumenta el paro, por el cambio de mentalidad en la sociedad a partir de la transición a la democracia: y por el aumento del nivel de vida. La mortalidad sigue siendo baja, aunque se aprecia un leve repunte al final del periodo, por el progresivo aumento de los ancianos en nuestro país.
En las ultimas decadas la poblacion ha ido envejeciendo, gracias al incremento de la esperanza de vida, esto hace que
España, se enfrente al envejecimiento de su población que, plantea una serie de interrogantes y problemas como que la financiación de las pensiones no depende de las cotizaciones efectuadas por los jubilados durante su época de actividad, sino de las que realizan los activos de cada momento y que el incremento del número de ancianos y la reducción de los activos implicarán modificaciones importantes en el sistema de pensiones. En cuanto a la salud, los ancianos consumen un elevado número de estancias hospitalarias, recetas y visitas médicas, lo que exige recursos crecientes y distribuirlos en relación con la localización geográfica de los ancianos, prestando atención a los municipios rurales, donde el envejecimiento es fuerte, y los equipos sanitarios, escasos. A nivel social, el envejecimiento plantea problemas de residencia y la necesidad de planearles ctividades para distraerles y sentirles útiles; lo que puede abrir nuevas expectativas a futuras profesiones que den respuesta a esta nueva y creciente demanda.
Jerarquía urbana:
El mapa muestra el sistema de ciudades en España. Está constituido por las ciudades y por las relaciones que se establecen entre ellas, que componen un sistema nacional integrado por varios ejes urbanos y unos subsistemas urbanos regionales que han cobrado fuerza a partir del establecimiento del estado de las autonomías.
Las organizaciones de la jerarquía urbana española se basan en el tamaño y las funciones de las ciudades, y las áreas de influencia de las mismas. Podemos apreciar distintas categorías:
Metrópolis. Son las áreas metropolitanas que se encuentran en la cima de la jerarquía del sistema urbano.
Las nacionales son las grandes áreas metropolitanas de Madrid y Barcelona. Su población supera los 3 millones de habitantes, las regionales son las áreas metropolitanas medias de Valencia, Sevilla, Bilbao, Málaga y Zaragoza. Su población se encuentra entre 1,5 millones y 500.000 habitantes y las metrópolis subregionales o regionales de segundo orden son áreas metropolitanas pequeñas como Valladolid, Pamplona o Palma de Mallorca. Tienen una población entre 500.000 y 200.000 habitantes.
Ciudades medias. La mayoría son capitales de provincia no incluidas en los apartados anteriores. Su población está en torno a los 250/200.000-50.000 habitantes.
Ciudades pequeñas o villas
Tienen una población entre 50.000 y 10.000 habitantes
Las relaciones urbanas se miden por los flujos económicos, de personas y de otros tipos. Madrid mantiene relaciones intensas con las demás metrópolis, El cuadrante nordeste es el área de mayor integración, pues sus cinco metrópolis principales mantienen intensas relaciones (Madrid-Barcelona-Valencia-Bilbao-Zaragoza).
El sistema urbano peninsular, se caracteriza por la localización en el centro de la mayor aglomeración urbana del país.Madrid es el núcleo urbano principal de España. Se caracteriza por sus funciones terciarias y mantiene relaciones con las principales ciudades españolas.
Los ejes urbanos periféricos:
El eje atlántico gallego; entre Ferrol y Vigo, especializado en el comercio
El cantábrico; entre el triángulo asturiano y el País Vasco,
El mediterráneo, desde Girona a Cartagena, es el más dinámico, con una industria muy diversificada y un fuerte peso de los servicios.
El del valle del Ebro enlaza los ejes cantábrico y mediterráneo y tiene como ciudad principal a Zaragoza.
El andaluz es doble, por una parte el eje litoral especializado en el comercio, el turismo y la agricultura tecnificada y por otra el eje del valle del Guadalquivir, entre la costa atlántica y Jaén
El interior peninsular carece de ejes urbanos integrados. Predominan las pequeñas ciudades especializadas en el comercio y la agroalimentación.
En Baleares, la formación de ejes urbanos se ve dificultada por la fragmentación territorial en islas.
En Canarias encontramos un sistema urbano policéntrico, con dos centros, las conurbaciones o submetrópolis regionales de Santa Cruz de Tenerife-La Laguna y Las Palmas de Gran Canaria- Telde. Cada una mantiene unas relaciones administrativas y económicas relevantes con las capitales de las islas periféricas de cada una de las provincias. La actividad dominante es la comercial, aunque también destaca la administrativa
Censo de población: Es un recuento individualizado de la población de un país en un momento dado. Recoge datos demográficos, económicos y sociales sobre la población y sobre las características de las viviendas. Es una operación de competencia estatal, realizada con fines estadísticos, que presenta una visión de la población en un momento determinado. Su información sólo puede ser publicada de forma numérica, sin referencias individuales. En España se realiza cada diez años.
Padrón municipal: Es un registro oficial de carácter administrativo, de competencia municipal cuya finalidad es conocer el número y las principales características de sus habitantes. Desde 1996 se actualiza anualmente, antes se renovaba cada cinco años. La información que contiene, menos amplia que la de los censos, ha servido como fuente demográfica para los estudios sobre población.
Relevo generacional: Porcentaje de hijos por mujer necesario para asegurar el mantenimiento de una población, es decir, que los nacidos igualen en número a los fallecidos. La tasa de reposición es de 2,2 hijos por mujer. También llamado reemplazo generacional
Jerarquía urbana:
Es el estudio de las relaciones de interdependencia que se producen entre las entidades de población, de un rango inferior a otras de nivel superior. Por ejemplo, para determinados servicios, como el educativo, dependiendo del grado de especialización debemos acudir a una ciudad mayor que nos lo proporcione. El modelo teórico más conocido para analizar la jerarquización del espacio es la teoría de los lugares centrales formulada por W. Christaller.
Registro civil:
registro de la población dependiente del Ministerio de Justicia. Recoge de forma oficial, y obligatoria desde 1871 los hechos demográficos que forman el movimiento natural de la población: nacimientos, muertes, matrimonios y divorcios.
Saldo migratorio:
diferencia entre las entradas por inmigración y las salidas por emigración. Si el resultado es positivo, predomina la inmigración, si es negativo, predomina la emigración.
Crecimiento Real:
Diferencia entre Crecimiento Natural y Saldo Migratorio. Para calcularlo habrá que sumar el crecimiento Natural con el Saldo Migratorio, teniendo en cuenta el signo de ambos ya que pueden ser negativos.