Desequilibrios Territoriales en España: Causas, Evolución y Políticas
Causas y Tipos de Desequilibrios
Los desequilibrios territoriales en España tienen raíces tanto en las condiciones naturales y la distribución desigual de los recursos como en la acción humana. Son el resultado de una combinación de factores históricos y contemporáneos.
Históricamente, la industrialización generó marcados contrastes entre la periferia y el interior, estableciendo un modelo territorial con un centro menos desarrollado y una periferia más dinámica. Esto condujo a significativos desequilibrios económicos, demográficos, sociales y de poder.
Se pueden identificar varios tipos de desequilibrios:
- Económicos: Originados por el desarrollo del sector secundario y el turismo en regiones como el País Vasco, Cataluña, Levante y Baleares. Madrid, por su parte, se centró en los servicios y el consumo, atrayendo industrias y dejando atrás al sector primario. Estos desequilibrios se manifiestan en el PIB, la renta per cápita y las infraestructuras.
- Demográficos: La crisis de la agricultura tradicional y el auge industrial provocaron migraciones hacia áreas urbanas, industriales y turísticas de la periferia y Madrid. Las zonas rurales sufrieron despoblación y envejecimiento.
- Sociales: Las regiones más desarrolladas y pobladas ofrecieron mejores servicios sociales y un nivel de vida más alto, mientras que las áreas menos favorecidas enfrentaron mayores dificultades.
- De poder: Las áreas más desarrolladas se convirtieron en centros de poder, relegando a las demás a una posición periférica y subordinada.
Evolución de los Desequilibrios desde 1975
La crisis económica de 1975 impactó fuertemente al sector secundario, causando una disminución del empleo, el PIB y la renta per cápita. Las regiones industriales perdieron su atractivo migratorio, lo que frenó la concentración espacial de la producción y la población. Esto provocó cambios significativos en los desequilibrios regionales:
- El desarrollo económico ya no se basa exclusivamente en la producción industrial debido a la crisis y la descentralización productiva.
- Se avanza hacia una economía y sociedad postindustrial, fundamentada en los servicios y las nuevas tecnologías. Esto implica una especialización en el sector terciario y en actividades económicas relacionadas con la tecnología.
- Se están generando nuevos desequilibrios entre:
- Ejes de desarrollo: Madrid, el litoral mediterráneo norte, el valle del Ebro, Canarias, Baleares y el País Vasco.
- Ejes en declive: La cornisa cantábrica.
- Espacios escasamente desarrollados: Extremadura, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Galicia, Andalucía y Murcia.
En los últimos años, algunas comunidades autónomas han experimentado un estancamiento económico, mientras que otras menos desarrolladas han crecido por encima de la media española, gracias a las ayudas estatales y de la Unión Europea, así como a la implementación de políticas regionales para fomentar su desarrollo endógeno.
Política Regional en España
La política regional en España cobró impulso en la década de 1960 con los planes de desarrollo, y se revitalizó a partir de 1986. Sus objetivos principales son:
- Promover la solidaridad interterritorial, según lo establecido en la Constitución.
- Establecer y desarrollar el Estado de las Autonomías.
- Cumplir con los compromisos derivados de la adhesión a la Unión Europea.
Los objetivos básicos de la política regional son:
- Alcanzar un desarrollo regional equilibrado, dando prioridad a las regiones más desfavorecidas.
- Fomentar el potencial endógeno de cada región.
Las estrategias para lograr estos objetivos incluyen:
- Impulsar el crecimiento de las áreas más dinámicas.
- Frenar el declive de la cornisa cantábrica.
- Potenciar el eje mediterráneo sur, conectándolo con el dinamismo del eje mediterráneo norte.
- Brindar un apoyo reforzado al resto de las regiones.
Los instrumentos clave para alcanzar estos objetivos son:
- Fondos de la Unión Europea:
- Fondos Estructurales: Destinados al desarrollo de las regiones más atrasadas (FEDER), la reconversión socioeconómica de zonas agrarias (FEOGA), pesqueras (IFOP), industriales o urbanas en crisis, y el fomento de los recursos humanos.
- Iniciativas Comunitarias: Programas especiales de la Comisión Europea para abordar problemas graves en toda la Unión.
- Fondo de Cohesión: Apoya a los países menos prósperos de la UE financiando proyectos medioambientales y de redes transeuropeas de transporte.
- Política de Incentivos Regionales: Adaptada a la legislación comunitaria tras el ingreso de España en la UE. Busca fomentar la competitividad empresarial y la solidaridad interregional mediante inversiones en infraestructuras y equipamientos, y compensaciones a la inversión en áreas desfavorecidas. Las ayudas se dirigen a la promoción de actividades viables que diversifiquen la economía.
- Fondo de Compensación Interterritorial: Un instrumento para combatir los desequilibrios regionales y promover la solidaridad interterritorial. Sus ingresos provienen de los Presupuestos Generales del Estado.
La planificación regional se caracteriza por:
- El protagonismo de las Comunidades Autónomas, que elaboran sus propios planes para cada área que recibe ayuda de la UE, siguiendo una metodología común.
- La obligación del Gobierno de presentar a la Comisión Europea una visión global de los planes regionales, resumiendo los planes estatales y autonómicos, e indicando los objetivos, actuaciones e inversiones previstas.
Ordenación del Territorio
La ordenación del territorio es una disciplina relativamente reciente, definida como la expresión espacial de la política económica, social, cultural y ecológica de una sociedad. Presenta un marcado contraste con enfoques anteriores.
Sus objetivos son:
- Lograr un desarrollo socioeconómico equilibrado de las regiones, controlando el crecimiento de las áreas congestionadas e impulsando el desarrollo de aquellas en retraso, decadencia o crisis.
- Favorecer la conexión de las regiones periféricas con los centros económicos e industriales de Europa.
- Organizar integralmente el espacio, armonizando las políticas sectoriales, promoviendo estrategias de desarrollo sostenible y mejorando la calidad de vida y el bienestar social.
La ordenación del territorio es, además, una disciplina científica y una tarea política.
El instrumento fundamental es la elaboración de un plan. Este proceso implica:
- Análisis de la situación actual.
- Planificación del territorio.
Este proceso generará efectos, tanto deseados como no deseados. Una vez alcanzado el modelo propuesto, será necesario analizarlo y plantear nuevos retos, convirtiendo la ordenación en un proceso circular e ininterrumpido.
El ámbito principal de actuación es la región. Las autoridades regionales elaboran planes territoriales generales, que a su vez se subdividen en planes parciales debido a la extensión del territorio.
La ordenación del territorio se estructura como una cadena de planes jerarquizados, donde cada uno establece directrices para los planes de nivel inferior.
En España, la ordenación del territorio comenzó en la década de 1980, tras la consolidación del Estado de las Autonomías, y se ha desarrollado principalmente a nivel regional. El principal desafío radica en la coordinación entre las diversas administraciones, lo cual requiere una comunicación fluida entre ellas.