Cuencas Sedimentarias: Formación, Tipos y Evolución

Cuencas Sedimentarias

Una cuenca sedimentaria es una zona de la superficie terrestre donde se acumulan grandes cantidades de sedimentos durante millones de años. Tras la formación de una depresión, la subsidencia de la cuenca permite su relleno. Las áreas de acumulación están rodeadas por zonas emergidas que actúan como fuente de sedimentos.

Fases de una Cuenca Sedimentaria

Se pueden diferenciar tres fases principales:

  • Génesis: Formación de la depresión inicial.
  • Fase de depósito: Acumulación de sedimentos.
  • Fase de deformación: Principalmente debido a procesos tectónicos.

La tectónica, con sus movimientos verticales y horizontales, es la principal responsable de la formación de las cuencas. También controla los sistemas de dispersión de sedimentos, la subsidencia y la deformación de la cuenca.

Tipos de Cuencas Sedimentarias

Existe una gran variedad de cuencas sedimentarias, que se pueden clasificar según diferentes criterios.

Según el tipo de sustrato:

  • Cuencas sobre sustratos de corteza oceánica: Son zonas profundas (2-11 km) en los fondos oceánicos. Reciben pocos sedimentos, principalmente de origen marino profundo.
  • Cuencas sobre sustratos continentales: Se encuentran a pocos cientos de metros bajo el nivel del mar. Los sedimentos son marinos someros y continentales. Son zonas subsidentes, localizadas en márgenes divergentes.
  • Cuencas sobre sustratos oceánico-continentales: Se forman en zonas de transición, con sedimentos mixtos marinos y continentales.

Según la posición y límites:

Otro criterio es la posición de la cuenca y sus límites, ya sea sobre corteza rígida o móvil.

Según el tipo de límite de placas:

  • Límites divergentes: Las placas se separan, creando nueva corteza.
  • Límites convergentes: La litosfera antigua se hunde en la astenosfera (subducción).
  • Límites transformantes: No hay creación ni destrucción de placas.

Existen cuencas que no se forman en estos límites, como las cuencas intercratónicas (en cratones y escudos) o las de zonas de colisión. Estas se forman por la activación de algún proceso tectónico.

Subsidencia

La subsidencia es el proceso de hundimiento de la cuenca, que no siempre es uniforme. Puede ser regular, con sedimentos depositados a la misma profundidad, o irregular, con variaciones bruscas de profundidad.

Causas de la subsidencia:

  • Enfriamiento de la litosfera: Provoca adelgazamiento, especialmente en la litosfera oceánica.
  • Adelgazamiento por estiramiento: Común en márgenes divergentes.
  • Carga litostática: Puede ser tectónica o por el peso de los propios sedimentos. Común en zonas convergentes.

Formación de Cuencas en Diferentes Contextos Tectónicos

A partir de un punto triple, las placas se rompen, generando cuencas. En estos puntos, uno de los brazos falla y forma un rift, mientras que los otros dos se abren para formar océanos. El rift, inicialmente sobre corteza continental, pasa a estar sobre corteza oceánica a medida que avanza la expansión (Ciclo de Wilson).

Incluso en etapas de colisión, se pueden formar cuencas continentales, aunque menos importantes que las marinas.

En zonas de convergencia, el océano se cierra y la sedimentación continúa. Tras la desaparición del océano, se forma la cuenca de antepaís. La corteza oceánica se subduce, generando una cuenca delante (antearco) y otra detrás (antepaís) del arco volcánico. En la cuenca de antepaís, se depositan grandes cantidades de sedimentos terrígenos, formando enormes deltas. La subsidencia se produce por el apilamiento de mantos.

En márgenes continentales pasivos, se observa una plataforma, un talud y un borde precontinental, todo sobre corteza continental. Son comunes las fallas y grandes deslizamientos.

Existen márgenes no convergentes ni divergentes, relacionados con fallas de derrumbamiento. A lo largo de la falla se produce subsidencia en algunas zonas y elevación en otras. Estas cuencas, con corteza continental y oceánica, tienen bordes asimétricos y sedimentación intensa. El movimiento de las fallas produce grandes terremotos (ejemplo: Los Ángeles, limitado por la falla de San Andrés y la falla de San Gabriel).

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