Centros de Acción: Altas y Bajas Presiones
A las áreas de altas y bajas presiones las denominamos centros de acción. Para medir la presión del aire utilizamos el barómetro, cuya unidad de medida es el hectopascal.
- En aquellas áreas de la superficie terrestre donde se produce la convergencia del aire, este asciende y provoca una disminución de la presión y un estado inestable del aire. Se forma un centro de acción de bajas presiones o ciclónico, el sentido es contrario a las agujas del reloj. La inestabilidad del aire genera nubosidad.
- En los lugares donde se produce un descenso del aire desde la alta troposfera, aumenta la presión en superficie y se forma un centro de altas presiones o anticiclónico, con sentido igual al de las agujas del reloj. El aire es estable.
Para visualizar gráficamente los centros de presión utilizamos mapas de isobaras en los que se dibujan figuras mediante líneas imaginarias que unen puntos de igual presión.
Influencia en la Península Ibérica
La península ibérica se sitúa en una zona muy activa en relación con la circulación general atmosférica; su posición en la fachada occidental europea, en el punto de contacto entre un área continental y otra oceánica, así como en la banda de latitudes intermedias, entre las altas y bajas latitudes polares y tropicales, hace que se halle afectada por influencias muy diversas. Los principales centros de acción que influyen de manera más intensa en los climas españoles son:
1. El Anticiclón de las Azores
Es de origen dinámico, se desplaza por el Atlántico y en verano ocupa generalmente latitudes más altas, en invierno se desplaza hacia el sur. Afecta a la península más en verano.
2. La Baja Presión de Islandia
Son bajas presiones generadas por el choque de altas presiones polares y subtropicales, se localiza en el Atlántico norte (al sur de Islandia). En invierno desciende sobre las Islas Británicas e incluso más al sur, es cuando afecta más a España. Envía aire polar marítimo (frío y húmedo). En las estaciones intermedias (primavera y otoño) se alternan el anticiclón de las Azores y la depresión de Islandia, lo que explica la inestabilidad de dichas estaciones.
3. Anticiclones Térmicos Continentales y Peninsulares
Son el europeo-asiático, el peninsular y el del norte de África. Actúan en invierno y se originan por el contacto con suelos fríos, por tanto, cuanto más frío mayor será la intensidad de estos anticiclones. Los euroasiáticos son más potentes que los norteafricanos. Provocan tiempo frío y seco, con heladas nocturnas, cielos despejados y nieblas sobre las depresiones como consecuencia de la inversión térmica. El anticiclón térmico peninsular afecta principalmente a la mitad norte de la península.
4. Bajas Presiones Térmicas Continentales y Peninsulares
Actúan en verano. La baja peninsular se genera más frecuentemente sobre la mitad sur y ocasiona tormentas locales. La baja norteafricana se forma sobre grandes áreas desérticas del Magreb, provoca olas de calor en sus desplazamientos al norte, afecta a Andalucía y puede provocar lluvias de arena debidas al efecto chimenea del centro de las borrascas, lo que provoca que arrastren por subducción arenas que pesan poco y cuando se unen a frentes nubosos provocan lluvias de barro.
5. La Baja Presión del Golfo de Génova
Es de origen dinámico y se genera en la zona de contacto de masas de aire frío del centro y norte de Europa y las húmedas y templadas del Mediterráneo. Actúa de octubre a abril y aporta a la península ibérica aire húmedo. Su influencia es bastante local y afecta principalmente a Cataluña, Valencia y Baleares. Una parte importante de las lluvias que se producen en el este y en el noreste español son debidas a esta borrasca.
Masas de Aire
Llamamos masas de aire a un extenso cuerpo de aire en el que los gradientes de humedad y de temperatura son bastante uniformes. Cuando dos masas de aire de características diferentes entran en contacto apenas se mezclan y entre ellas se forma un límite muy definido, llamado frente. Las masas de aire se originan en las áreas anticiclónicas polares y subtropicales del planeta, ya que es en estas zonas donde el aire estable permanece durante más tiempo, adquiriendo las características que definen a cada masa. Podemos clasificarlas de la siguiente manera:
- En función de su latitud pueden ser árticas, polares o tropicales.
- En función de la superficie pueden ser continentales o marítimas.
Frentes
Un frente es una zona de transición entre dos masas de aire. Al frente que separa las masas polares de las tropicales le denominamos frente polar. La dirección de desplazamiento es oeste-este. Una borrasca de frente se origina cuando, por la dinámica atmosférica, se produce una ondulación entre la masa de aire polar y la de aire tropical que lleva a la más cálida y ligera (la tropical) a ascender sobre la más fría y densa (la polar).
- Frente cálido: el aire cálido sustituye al frío. Se alcanza el punto de rocío. Afecta a zonas muy amplias. Precipitación suave y continua.
- Frente frío: el aire frío sustituye al cálido. Afecta a superficies de menor extensión. Precipitaciones más fuertes.
- Frente estacionario: no tiene movimiento. Las masas de aire están en reposo.
- Frente ocluido: se da cuando un frente frío, en su avance, llega a sobrepasar a un frente cálido.
Corriente en Chorro (Jet Stream)
La diferencia de altura entre la troposfera polar y la tropical genera un escalón que induce la aceleración de los vientos del oeste que llegan a alcanzar velocidades de 400 km/h. Sigue la siguiente evolución:
- Inicialmente la corriente discurre de oeste a este en el sentido de los paralelos, con pequeñas ondulaciones. Desarrolla su máxima velocidad.
- Con el tiempo, las pequeñas ondulaciones se van haciendo mayores, hasta formar una circulación en meandros. Velocidad menor. La dirección dominante es la de los meridianos.
- Si estos meandros terminan cerrándose, se generan depresiones frías en latitudes bajas y anticiclones cálidos en latitudes altas.
Cuando se desgaja una célula de aire frío del chorro polar y queda aislada en altura decimos que se ha formado una gota fría. Son frecuentes en el levante español.
La corriente en chorro suele aparecer representada en los mapas de altura de 300 hPa (9000 m de altitud).