La Oferta Turística en España
La oferta turística es el conjunto de servicios disponibles para el turista. Está integrada por quienes venden el producto (agencias de viajes, instituciones de promoción turística) y por las instalaciones turísticas. Estas últimas cubren las necesidades de alojamiento, manutención y recreo del turista.
La oferta de alojamiento es muy amplia, concentrándose especialmente en el litoral mediterráneo e insular, aunque en los últimos años ha crecido en el interior peninsular. Se compone de más de 1 millón de plazas en establecimientos hoteleros de categoría media y baja, y más de 10 millones de plazas en establecimientos extrahoteleros. La oferta de manutención incluye servicios de restauración como bares y cafeterías. La oferta de recreo comprende instalaciones deportivas, parques recreativos y acuáticos, entre otros.
La Demanda Turística en España
La demanda turística es el colectivo que solicita los servicios turísticos. Históricamente, estuvo dominada por el turismo extranjero, aunque actualmente se ha producido un incremento significativo de la demanda nacional. La demanda internacional procede mayoritariamente de Europa Occidental y del Norte, con turistas provenientes principalmente de países como Alemania, Francia, Reino Unido e Italia.
El turismo extranjero es principalmente estival, localizándose en Baleares, Canarias, Cataluña, Andalucía y la Comunidad Valenciana. Recurre con mayor frecuencia al paquete turístico y al alojamiento hotelero. La demanda nacional procede mayoritariamente de Madrid, Cataluña, Andalucía y la Comunidad Valenciana. Se reparte mejor a lo largo del año y diversifica más los lugares de destino, eligiendo preferentemente las comunidades del litoral mediterráneo y, en menor medida, las del interior (Madrid, ambas Castillas).
La excesiva estacionalidad de la demanda es uno de los principales problemas del turismo español, ya que la mayor demanda coincide con las vacaciones de verano. La concentración de la demanda provoca un exceso de utilización estacional de las infraestructuras, con la consiguiente saturación, pérdida de calidad y problemas medioambientales. Sin embargo, se aprecia una suavización de la estacionalidad debido al desarrollo del turismo interno de invierno, de fin de semana y puentes, y del turismo social.
Tipos de Turismo en España
Los tipos de turismo más importantes son el turismo de sol y playa, aunque desde la década de 1990 han cobrado importancia creciente otras modalidades que aprovechan la diversidad de recursos turísticos de España. Las causas de este hecho son las exigencias de diversificación de la clientela, la demanda de espacios no saturados, el incremento del turismo nacional a lo largo del año (fines de semana y puentes) y la promoción del turismo.
Los turismos con mayor diversidad y recursos turísticos son:
- Turismo de borde de agua: Tiene como modalidad mayoritaria el turismo costero de sol y playa, aunque existen otras ligadas a ríos, lagos y embalses. Se practican actividades variadas como deportes náuticos y natación.
- Turismo de montaña: Principalmente el turismo de nieve ligado al deporte del esquí.
- Turismo ecológico o ecoturismo: Se centra en la visita a espacios naturales protegidos, como parques nacionales o naturales.
- Turismo rural: Incluye el alojamiento y la estancia en el mundo rural, caracterizado por la tranquilidad y la calidad medioambiental.
- Turismo urbano: Es principalmente un turismo cultural dirigido a ciudades con patrimonio histórico, artístico y cultural, o declaradas Patrimonio de la Humanidad. Dentro de este turismo se encuentra el turismo urbano de negocios, que incrementa sus actividades (ferias, exposiciones, etc.).
Áreas Turísticas en España
Los espacios turísticos incluyen áreas y puntos turísticos. Las áreas turísticas son espacios amplios con una elevada densidad de turistas extranjeros o nacionales. Los puntos turísticos son focos turísticos aislados, ligados a atractivos concretos como las estaciones de esquí. De acuerdo con su uso, todos estos espacios turísticos pueden ser de temporada o especialmente turísticos, o bien con visitas puntuales.
Áreas Turísticas de Alta Densidad
Las áreas turísticas de sol y playa son las Islas Baleares y Canarias, y la costa mediterránea peninsular. Todas reciben una importante afluencia turística. La accesibilidad ha favorecido el temprano desarrollo turístico de las zonas más accesibles a la clientela europea por carretera o vía aérea. El modelo de ocupación del espacio diferencia las zonas en las que los alojamientos en instalaciones turísticas se integran en los núcleos de población preexistentes, modificándolos. El tipo de alojamiento distingue zonas con predominio de establecimientos hoteleros o extrahoteleros.
Madrid, la capital administrativa y financiera de la nación, apenas presenta estacionalidad turística y alberga una importante oferta hotelera.
Áreas Turísticas de Media y Baja Densidad y Puntos Turísticos
Las áreas turísticas con densidad media y baja, y los puntos turísticos, están relacionados con la difusión del turismo de sol y playa hacia espacios litorales o prelitorales.
- Ciertos tramos del litoral y prelitoral mediterráneo y sur atlántico se han incorporado al turismo de sol y playa.
- El litoral gallego y cantábrico ofrece áreas costeras e interiores no masificadas.
- Los puntos turísticos más destacados son las estaciones de esquí, los centros de turismo rural, etc.