Legado Colonial y Desafíos del Desarrollo en el Tercer Mundo: África, Asia y Latinoamérica

1. La Herencia del Pasado Colonial

El pasado colonial deja profundas consecuencias en los países del Tercer Mundo tras su descolonización durante la segunda mitad del siglo XX. La conquista colonial generó dos formaciones económicas y sociales: un capitalismo central, en las metrópolis, y un capitalismo periférico, en las zonas coloniales. Estas dos formaciones fundamentan el intercambio de mercancías y los movimientos de capital de acuerdo con estos rasgos:

  • Las colonias proveen productos agrícolas de exportación.
  • El capital europeo invierte en minería y el sector terciario.
  • El centro desarrollado aporta manufacturas.

Este proceso genera una quiebra del modelo preindustrial de la periferia y acarrea su pauperización. En caso de experimentar cierto crecimiento económico, las formaciones periféricas presentan un modelo basado en estas características:

  1. Predominio del capitalismo agrario y comercial.
  2. Constitución de una burguesía local.
  3. Tendencia a un desarrollo burocrático propio.
  4. Pervivencia de modos de producción anteriores al colonialismo.

La rapidez de la descolonización responde a distintas razones económicas:

  • Aumento de los costes de mantener el Imperio para la metrópoli.
  • Menor importancia de las colonias como proveedoras de alimentos.
  • Mantenimiento de la dependencia económica de los nuevos países.

2. Características Estructurales del Subdesarrollo

Algunos países han demostrado una indudable capacidad industrial, aunque, en general, los coeficientes de exportación sobre el PIB son altos solo por la debilidad del mercado interior. Se observa un incremento de la industrialización en bastantes países en vías de desarrollo durante la segunda mitad del siglo XX. Por el contrario, la insuficiencia de la industria pesada se revela en el bajo porcentaje de maquinaria y material de transporte. En caso de existir una actividad productiva dinámica, suele constituir un enclave controlado por el capital extranjero. La desarticulación de la estructura productiva se manifiesta en:

  • La fragmentación del mercado interior.
  • Una estructura no integrada de comunicaciones y transportes.
  • Una sociedad poco vertebrada.

2.1 Dependencia

a) Dependencia comercial. Si dos terceras partes de las exportaciones del Tercer Mundo se dirigen a los países desarrollados, estos solo remiten una cuarta parte de sus exportaciones al Tercer Mundo. Las razones radican en cambios económicos:

  • La productividad agrícola aumenta.
  • Los países desarrollados se orientan a un comercio intraindustrial.
  • Al aumentar la renta per cápita, el gasto destinado a sufragar las necesidades básicas disminuye.
  • La tecnología importada de los países desarrollados se encarece.
  • El fuerte crecimiento demográfico del Tercer Mundo reduce a menudo la tierra disponible por trabajador y la productividad agrícola.

b) Dependencia productiva, reflejada en la alta participación del capital extranjero en las economías en vías de desarrollo.

c) Dependencia financiera. Ante las dificultades de los países del Tercer Mundo para sufragar los intereses o amortizar la deuda, se abren procesos de negociación con sus acreedores.

d) Dependencia tecnológica. Muchos países en vías de desarrollo son inducidos a importar técnicas y bienes de equipo sofisticados para mantenerse en la carrera industrial.

3. África, Asia y Latinoamérica: Tres Caminos Diferentes

El mayor desarrollo de ciertas zonas de Asia oriental (Taiwán, Corea, Singapur, Hong Kong) remite a circunstancias favorables como las siguientes:

  • Población carente de desigualdades sociales y económicas.
  • Una agricultura dinámica.
  • Amplia disponibilidad de capital extranjero.
  • Escaso recurso a la inversión extranjera directa.
  • Altas tasas de ahorro e inversión.
  • Fuerte intervención del Estado en el sistema financiero, la política industrial y el sector exportador.

El caso chino resulta peculiar por su evolución desde fines de los años setenta desde el modelo comunista creado a mediados de siglo a una economía socialista de mercado sin alterar su régimen político. Tras triunfar la revolución comunista en 1949, bajo la dirección de Mao Tse-Tung, el modelo económico se caracterizó por:

  • Procura de una mayor igualdad económica y social.
  • Colectivización de la propiedad agrícola.
  • Nacionalización de la industria.
  • Primacía de la industria sobre la agricultura.
  • Planificación más descentralizada y selectiva.
  • Independencia de capital y tecnología extranjeros.

Solo el fallecimiento de Mao Tse-Tung en 1976 permitió ciertas reformas, que marcaban la transición hacia una economía de mercado:

  • Reforma agrícola. Se produce un desmantelamiento de comunas y una concesión de mayor autonomía a las familias campesinas.
  • Reforma industrial. Se concede permiso para crear empresas no estatales.
  • Reforma comercial y financiera, orientada a atraer capital y tecnología extranjeros para crear puestos de trabajo y modernizar el tejido industrial.

El desarrollo latinoamericano vino lastrado por mayores problemas. Entre las principales dificultades se hallan:

  • Desigualdad económica y social de la población.
  • Explosión demográfica, que perpetúa el paro.
  • Carencia de reformas agrarias que distribuyan la propiedad de la tierra.
  • Fuerte presencia de la inversión extranjera.
  • Aumento de la deuda externa.
  • Dificultad de absorción de tecnología por la carencia de capital humano.

Como solución, se planteó la adopción de políticas neoliberales en Latinoamérica durante los años ochenta, similares a las adoptadas en los países capitalistas. El fracaso de este programa neoliberal condujo a un acuerdo entre acreedores y deudores que permitió reflotar las economías de estos países, pero no eliminó sus problemas estructurales.

África ha experimentado la andadura más desafortunada de todas las áreas descolonizadas:

  • Las dificultades para culminar la transición demográfica han reducido una renta per cápita ya mermada por el escaso desarrollo económico.
  • La fuerte pervivencia de estructuras políticas, económicas y sociales propias de la época preindustrial impidió la consolidación de democracias y dificultó la introducción de reformas.
  • Favorecida por la carencia de una burguesía propia, la explotación de los recursos naturales por parte de países extranjeros ha tenido especial relevancia.
  • La incapacidad financiera, las carencias de capital humano y la inexistencia de industrias plantean especiales dificultades a la transferencia tecnológica y al desarrollo industrial.

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