España: Transformación Económica, Social y Demográfica (1982-2023)

Evolución Económica, Social y Demográfica en España (1982-2023)

Evolución Económica

Desde 1982, España ha experimentado una notable transformación económica, pasando por diferentes momentos:

  • Crecimiento económico (1982-1993): Consecuencia de las medidas contra la crisis económica (reconversión industrial, devaluación de la peseta) y la entrada en la CEE (1986), que abrió España a la inversión extranjera y permitió la afluencia de ayudas y subvenciones.
  • Liberalización de la economía (1993-2008): El crecimiento finalizó en 1993 con el aumento de la deuda pública y el desempleo. Aznar impulsó una política liberal mediante el recorte del gasto público, la reducción de la carga fiscal y la privatización de empresas públicas (Telefónica, Endesa, etc.). El crecimiento se recuperó aumentando el empleo, el PIB y la renta per cápita, si bien con una dependencia excesiva de la construcción.
  • Crisis de la economía y recuperación (2008-2023): La crisis económica internacional golpeó duramente provocando el cierre de numerosas empresas y el incremento del paro. El aumento de las prestaciones por desempleo y la caída de la recaudación fiscal disparó la prima de riesgo llevando al Estado al borde de la quiebra. Las duras medidas de ajuste (recorte del gasto público, reforma laboral) y la mejora de la economía mundial permitió iniciar desde 2014 una lenta recuperación que los últimos acontecimientos (COVID-19, aumento mundial de la inflación, crisis energética) han vuelto a poner en riesgo.

Las características actuales de la economía española contrastan con las existentes a inicio de los años 80 del pasado siglo, fruto de la evolución del país:

Apertura al exterior

España ha evolucionado de una economía proteccionista y cerrada sobre sí misma, a una abierta al exterior. La entrada en la CEE supuso un hito esencial en este proceso de apertura, reforzado en las últimas dos décadas por el proceso de globalización. La inversión extranjera y las subvenciones comunitarias han contribuido significativamente al crecimiento de la economía española. Asimismo, desde mediados de los 90 aumentó la inversión española en el extranjero, especialmente en América Latina.

Desarrollo tecnológico

La economía española ha experimentado un notable desarrollo tecnológico en los últimos años con la introducción y aplicación de nuevas tecnologías y la digitalización de muchos sectores. No obstante, la inversión española en I+D+I es menor a la de muchos países de su entorno, generando dependencia tecnológica, fuga de cerebros y merma de la competitividad.

Terciarización de la economía

Como en el resto de las economías occidentales, el sector terciario genera más riqueza y empleo que los dos restantes, que han perdido gran parte del peso (en especial el primario) con que contaban al inicio de la Transición. Destaca por su importancia para la generación de riqueza y empleo el turismo, que se mantiene como la principal actividad económica de muchas regiones de España.

Modernización de las actividades agrarias

La pérdida de peso del sector primario en el sistema productivo ha ido acompañada de una modernización de un sector muy dependiente de las políticas agrarias establecidas por la UE.

Crisis industrial

Aunque en todos los países del entorno se asiste a un retroceso del sector secundario como fuente de riqueza y empleo el proceso ha sido particularmente grave en España, que ha tenido que afrontar un duro proceso de reconversión, así como de adaptación a los retos de la globalización (deslocalización) y la cuarta revolución industrial.

Evolución Social

Desde el fin del franquismo se ha asistido a una notable transformación de la sociedad española, cuyas principales características actuales son:

  • Descenso de la religiosidad: En los últimos años se ha asistido a un notable descenso de la religiosidad, en especial entre los jóvenes y la población urbana, al tiempo que ha aumentado el número de quienes se declaran ateos o profesan credos diferentes al catolicismo.
  • Liberalización de las costumbres: El descenso de la religiosidad, los avances sociales y la multiculturalidad han propiciado una notable crisis de los valores tradicionales, especialmente en los sectores de población más jóvenes. Los efectos más destacados de esta crisis son el cuestionamiento de la familia como núcleo básico de la sociedad, la defensa de la igualdad de género y la diversidad sexual y el rechazo hacia la jerarquía o el autoritarismo.
  • Nuevos modelos familiares: La crisis de la religiosidad y los valores sociales tradicionales han propiciado la generalización de nuevos modelos familiares, como los monoparentales o los formados por parejas del mismo sexo.
  • Cambios en el ocio y la cultura: Algunos de los entretenimientos que contaban con más respaldo social a principios de siglo (toros, caza, teatro, zarzuela) han sufrido un descenso de su popularidad. Por el contrario, se ha incrementado la importancia de actividades de ocio y tiempo libre asociadas a la sociedad de consumo y la cultura de masas (fútbol, conciertos).

Evolución Demográfica

De forma paralela a las transformaciones sociales, España ha experimentado notables cambios en su estructura demográfica en las últimas décadas:

  • Transformación demográfica: España ha completado la última etapa del proceso de transición demográfica, caracterizada por bajas tasas de natalidad y mortalidad (menos del 10‰), un crecimiento natural escaso o negativo y un incremento de la esperanza de vida.
  • Aumento de la inmigración: España ha pasado de ser un país de emigrantes a convertirse en un país receptor, especialmente durante los años de mayor bonanza económica (1995-2007). Los grupos más numerosos son iberoamericanos, marroquíes y rumanos, asentándose sobre todo en las grandes ciudades y en la costa mediterránea.

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