Evolución de la Industria Siderúrgica en la Región Cantábrica: Auge, Crisis y Transformación
La Industria en la Región Cantábrica
La industria en la Región Cantábrica ha sido el sector que ha organizado y definido su desarrollo económico. El este se especializó en la siderurgia, mientras que el oeste se enfocó en el sector textil. El auge industrial se vio impulsado por la abundancia de minerales en la región, siendo el carbón la principal materia prima.
Desarrollo de la Siderurgia
Los minerales de hierro, junto con el carbón vegetal, fueron fundamentales en los inicios. El gran cambio se produce en el siglo XIX, cuando se comienza a utilizar hierro colado a partir del carbón mineral en Asturias. Este hecho propició el asentamiento de la industria en la región. La primera fábrica se establece en 1848 en Mieres, seguida por otras en Quirós y La Felguera, todas ellas ubicadas estratégicamente cerca de las fuentes de mineral. Asturias se consolidó como la mayor productora de acero de España.
Sin embargo, la baja calidad del mineral asturiano llevó a la importación de carbón desde el País Vasco. Este carbón no se utilizaba en su estado natural, sino que se transformaba en coque.
La Siderurgia en Vizcaya
En Vizcaya, se disponía de hierro, pero no de carbón hasta la llegada del carbón inglés. Las industrias locales utilizaban carbón mineral, mucho más caro que el vegetal, lo que las hacía menos competitivas frente a las asturianas. La situación cambió con la importación de carbón inglés y el inicio del comercio entre la región e Inglaterra. Este hecho propició el asentamiento de grandes empresas en la Ría de Bilbao, como La Iberia, La Vizcaya y Altos Hornos de Bilbao. En 1902, estas empresas se fusionaron para formar Altos Hornos de Vizcaya, controlada por las familias burguesas de Bilbao, quienes dominaban tanto la producción como la legislación.
La Ría de Bilbao experimentó un notable crecimiento demográfico debido a la expansión industrial.
La Siderurgia en Cantabria
En Cantabria, existía una cierta tradición metalúrgica, pero los altos hornos no llegaron hasta unas décadas después. La industria más destacada en esta época era Forjas de Buelna (1873), creada por José María Quijano.
Política Proteccionista y su Impacto
La Política Proteccionista del Gobierno fue decisiva para el desarrollo de la industria siderúrgica. A partir de 1891, se impusieron aranceles a los productos siderúrgicos extranjeros, lo que mejoró la competitividad del producto español.
Gracias a esta política, la siderurgia de la región alcanzó gran relevancia en España hasta el Crack del 29. Sin embargo, esta protección generó problemas a largo plazo, ya que las industrias se quedaron anticuadas en comparación con las europeas, tanto en tecnología como en gestión. La falta de competitividad se hizo evidente en los años 40, durante el periodo de autarquía, cuando la industria española no pudo competir con los productos extranjeros.
Problemas de Abastecimiento y la Creación de ENSIDESA
La industria siderúrgica española enfrentó graves problemas, como la escasez de carbón, lo que obligó a consumir carbón nacional asturiano, de menor calidad que el inglés. También hubo una falta de abastecimiento de chatarra para refundir y crear nuevos productos, ya que España nunca había generado mucha chatarra debido al tamaño y número limitado de sus industrias.
Otro problema fue el suministro eléctrico, que era irregular en España en esa época. Además, la política de precios no era la adecuada.
Estos factores llevaron a que las industrias españolas estuvieran mal abastecidas, viéndose obligadas a importar productos del extranjero. Para solucionar esta situación, el Estado franquista creó una gran industria siderúrgica integrada en Asturias: ENSIDESA (Empresa Nacional Siderúrgica, S.A.). Se instaló en Avilés en 1957, como una gran planta pública destinada a abastecer la demanda nacional.
Cambios en la Localización y Desarrollo de ENSIDESA
Con la creación de ENSIDESA, se produjo un cambio en la localización de la industria. En lugar de situarse al pie de la materia prima, en la cuenca minera, se instaló cerca del puerto. La menor necesidad de carbón hizo que la proximidad a la mina fuera menos crucial. Sin embargo, el hierro seguía siendo importante y este llegaba por mar. Además, la ubicación costera facilitaba la exportación del producto.
La Ría de Avilés fue acondicionada y se construyó un puerto para la compañía. Sin embargo, la ría tenía poco calado y anchura, lo que impedía la entrada de grandes buques. Para solucionar este problema, se construyó un ferrocarril desde la fábrica hasta Gijón, cuyo puerto sí podía recibir a los grandes buques.
La fábrica se ubicó en un área rural para permitir su expansión. No obstante, al ser una zona de marisma, se presentaron dificultades en su construcción y posterior crecimiento.
ENSIDESA generó un gran crecimiento demográfico, duplicando la población del lugar en una década. Se crearon muchos puestos de trabajo, atrayendo no solo a trabajadores, sino también a sus familias. Para alojar a esta población, la fábrica construyó poblados y barrios para los obreros. Algunos también se asentaron en los pueblos de alrededor.
La Siderurgia Privada y la Creación de UNINSA
También existía la siderurgia privada, que todavía se localizaba en las cuencas mineras, con empresas como Duro Felguera, Fábrica de Mieres y Santa Bárbara. Estas tres se unieron para crear una única fábrica, UNINSA (Unión de Siderúrgicas Asturianas, S.A.), como respuesta a la construcción de ENSIDESA por parte del sector privado. Las fábricas de las cuencas mineras terminaron cerrando.
UNINSA era muy similar a ENSIDESA, pero eventualmente desapareció y fue absorbida por esta última. De esta manera, toda la siderurgia de Asturias pasó a ser pública.
Los problemas de UNINSA eran similares a los de ENSIDESA. Además, el cierre de las fábricas en las cuencas mineras dejó a la población sin empleo.
Consolidación de Asturias como Líder Siderúrgico
Asturias se convirtió en la región española con mayor producción siderúrgica. Esto perjudicó a Altos Hornos de Vizcaya, que se vio obligada a renovarse y mejorar, recibiendo ayudas para ello. Sin embargo, no fue suficiente para competir con la siderurgia asturiana.
Por primera vez, entró capital estadounidense en Vizcaya por parte de la USS, lo que mejoró las condiciones de las fábricas de Bilbao. Se comenzó a trabajar con patentes y tecnología extranjera, lo que implicaba que los beneficios no repercutían en la industria española, sino en la estadounidense, dificultando el desarrollo local. Mientras tanto, en Cantabria se inició el proceso de mejora de los Altos Hornos de Nueva Montaña y Forjas de Buelna para competir con las demás empresas de la región. Ambas se fusionaron en Nueva Montaña Quijano, estableciendo una especialización productiva.
También destacó la empresa Naval en Reinosa, dedicada a productos de guerra, que también se modernizó y renovó.
Crisis del Petróleo y Reconversión Industrial
Con todas las fábricas de la región, se consiguió abastecer a todo el mercado nacional en los años 70. Sin embargo, la crisis del petróleo redujo notablemente la demanda siderúrgica, generando grandes deudas debido a las inversiones realizadas. Además, se evidenció que las fábricas no eran modernas.
En los años 80, se llevó a cabo una nueva reconversión industrial, con cambios financieros para reducir las deudas y los costes de producción, así como una reducción de las plantillas. Se otorgaron ayudas estatales, pero las industrias deficitarias tuvieron que cerrar. Las empresas que quedaron redujeron sus plantillas en 1981.
Dentro de la Unión Europea, se nacionalizaron los Altos Hornos de Vizcaya. Por tanto, durante los años 80, esta empresa y ENSIDESA fueron públicas.
Transformación del Paisaje Industrial
En Vizcaya, se cerraron gran parte de las industrias y se remodelaron los espacios que dejaron, creando espacios culturales como el BEC (Bilbao Exhibition Centre) e implantando nuevas industrias, pequeñas y modernas.
En Asturias, también se remodeló el espacio industrial, implantándose pequeñas fábricas, tanto en dimensiones como en plantilla, reduciendo así los costes. Casi todas estas fábricas funcionan con chatarra.
Privatización y Creación de ACERALIA y ARCELORMITTAL
Desde el punto de vista empresarial, en los años 90 se privatizaron las fábricas públicas y se creó ACERALIA (con capital español y de Luxemburgo). Esta se unió con otra empresa para formar ARCELOR. En los años 2000, se fusionó con una empresa india, creando ARCELORMITTAL. Actualmente, todas las fábricas siderúrgicas de España son de propiedad india. Gracias al proceso de reconversión, en 1989 las fábricas siderúrgicas españolas volvieron a tener beneficios. Hasta la crisis actual, la situación era buena, pero en la actualidad, la producción y la demanda de este sector han caído.