1. Introducción
Este documento analiza la evolución de las tasas de **natalidad** y **mortalidad** en España entre 1940 y 2022, a partir de una gráfica lineal. Se observa una tendencia general a la baja en la **natalidad**, con dos repuntes significativos: uno entre 1950 y 1960, coincidiendo con el *baby boom* de la posguerra, y otro entre 1995 y 2005, impulsado por la buena coyuntura económica y la llegada de inmigrantes. Desde 1975, la **natalidad** experimenta un descenso más pronunciado, llegando a menos del 1‰ en 1995. A partir de 2015, la **natalidad** continúa su declive, y el crecimiento natural se torna negativo debido a que las defunciones superan a los nacimientos. La **mortalidad** también muestra una tendencia descendente, con fluctuaciones entre el 8‰ y el 9‰, excepto en 2020, año marcado por la pandemia de COVID-19. Estos cambios reflejan la **transición demográfica** de España: de un modelo antiguo, caracterizado por alta **natalidad** y **mortalidad**, a uno moderno, con menos nacimientos y una población envejecida.
2. La Natalidad en España (1940-2022)
La **natalidad** en España ha experimentado una notable caída entre 1940 y 2022. Entre 1940 y 1950, descendió 4 puntos debido a las secuelas de la posguerra, la crisis económica y el exilio tras la Guerra Civil. Ni siquiera la política pronatalista del régimen de Franco logró revertir esta tendencia. Entre 1950 y 1960, se registró un ligero aumento debido al *baby boom* postbélico y a la mejora económica tras la autarquía. A partir de los años 60, la **natalidad** cayó de forma acusada por factores como la creciente vida urbana, los problemas de vivienda y la implantación de nuevos seguros laborales. En 1975, con la llegada de la democracia, el descenso se aceleró debido a la crisis económica, la disminución de los matrimonios jóvenes, la precariedad laboral, la legalización de los anticonceptivos, la despenalización del aborto y la incorporación de la mujer al mercado laboral. Entre 1995 y 2005, se produjo un repunte gracias a la buena coyuntura económica y a la llegada de inmigrantes. Sin embargo, desde 2008, la crisis económica volvió a impactar negativamente en la **natalidad**: aumento del paro, bajos salarios y menor inmigración. Desde 2015, la tendencia a la baja continúa debido a la disminución del número de mujeres en edad fértil y a la reducción del número de hijos por mujer. Esta situación ha contribuido al **envejecimiento de la población**, lo que requiere políticas de apoyo a la **natalidad** y a la migración para evitar problemas futuros.
3. La Mortalidad en España (1940-2022)
La **mortalidad** en España experimentó un descenso significativo entre 1940 y 1975, primero por el fin de la Guerra Civil y luego por las mejoras en la sanidad, la alimentación y la calidad de vida. Entre 1970 y 1975, se registró un ligero aumento debido a la crisis de 1973, pero posteriormente continuó su descenso hasta 1980 gracias al desarrollo del Estado de Bienestar. Desde 1985 hasta 2000, la **mortalidad** aumentó ligeramente debido al **envejecimiento de la población**. Después del año 2000, se observaron altibajos: disminuyó con la llegada de inmigrantes y aumentó con la crisis de 2008. En la actualidad, la mayoría de las defunciones se deben a las *tres ces*: enfermedades cardiovasculares, cáncer y accidentes de tráfico, relacionadas con el estrés, el sedentarismo y los malos hábitos. Además, se observa un aumento de enfermedades como el Alzhéimer y problemas sociales como el tabaquismo. Desde 2015, la **mortalidad** continúa en aumento debido al **envejecimiento de la población**, y en 2020, la pandemia de COVID-19 disparó la tasa. La alta esperanza de vida (83,5 años) plantea desafíos importantes: mayor gasto en pensiones y sanidad, menor población activa, aumento de la presión fiscal y un número creciente de hogares unipersonales.
4. Las Migraciones en España
Las **migraciones** son los movimientos de personas de un lugar a otro, generalmente por motivos económicos o sociales. Cuando alguien se va de su país, hablamos de **emigración**; cuando llega a otro, de **inmigración**. En España, este fenómeno ha sido clave: en el siglo XX, muchas personas emigraron debido a la Guerra Civil o en busca de trabajo. Sin embargo, desde 1995, España comenzó a recibir más inmigrantes de los que se iban. Esta tendencia se invirtió con la crisis de 2008, cuando muchas personas tuvieron que emigrar de nuevo, aunque desde 2016, la **inmigración** ha vuelto a superar a la **emigración**.
4.1. Emigración
Desde la crisis de 2008, muchos españoles jóvenes y bien formados se han trasladado a países como Alemania, Francia o Reino Unido en busca de mejores oportunidades. Esto ha provocado la *fuga de cerebros*, es decir, la pérdida de talento joven. Aunque esto alivia la demanda de empleo en España, también implica la pérdida de trabajadores cualificados. Las personas de otros países que residían en España también emigraron durante la crisis, regresando a sus países de origen o buscando otros destinos.
4.2. Inmigración
España es un país atractivo para los inmigrantes por varias razones: oportunidades de trabajo, clima favorable y vínculos históricos y culturales con América Latina. Se pueden distinguir dos grandes grupos: jubilados europeos que buscan un buen clima y personas procedentes de países como Marruecos o Colombia, que buscan mejores condiciones económicas. Aunque la **inmigración** ha contribuido al crecimiento económico y ha aportado mano de obra, también ha generado tensiones sociales y algunos problemas, como el racismo o la competencia por los empleos menos cualificados.
5. Consecuencias de las Migraciones
5.1. Demográficas
La **inmigración** ha sido fundamental para que la población de España siga creciendo. Sin ella, habría menos jóvenes y la población estaría aún más envejecida. Durante la crisis de 2008, las salidas aumentaron y se registró un saldo migratorio negativo, pero desde 2016, esta situación se ha revertido, contribuyendo a mantener el crecimiento de la población.
5.2. Económicas
Los inmigrantes han ocupado trabajos duros y poco remunerados, contribuyendo al crecimiento del PIB y ayudando a sostener el sistema de pensiones. Sin embargo, también han generado desafíos, como la presión a la baja en los salarios y el envío de remesas a sus países de origen, lo que afecta a la economía española. Por otro lado, la **emigración** de jóvenes cualificados ha provocado una *fuga de cerebros*, lo que implica una pérdida de talento y capacidad productiva.
5.3. Sociales
La llegada de inmigrantes ha generado diversidad cultural, pero también tensiones. Algunas personas perciben a los inmigrantes como competencia por los empleos y los recursos, lo que ha dado lugar a actitudes racistas o xenófobas. Además, los inmigrantes a menudo se enfrentan a condiciones de vida difíciles y a problemas de integración debido a diferencias culturales o lingüísticas.
6. Conclusiones
Para gestionar estos desafíos, España y la UE han establecido leyes y políticas que buscan controlar la **inmigración** ilegal, apoyar la integración de los inmigrantes y combatir la xenofobia. También se plantea la necesidad de invertir más en Investigación y Desarrollo para crear mejores oportunidades laborales y evitar que los jóvenes españoles sigan emigrando.