Los Espacios Industriales
1. Factores de Localización Industrial
Las industrias tienden a localizarse en aquellos espacios en los que se puede obtener la mayor eficacia productiva, en aquellos lugares donde las empresas pueden conseguir mayores ventajas. Las nuevas tecnologías han transformado los sistemas de producción.
1.1. Factores de Localización Tradicionales
Los principales factores son:
- La proximidad a las materias primas y las fuentes de energía.
- La importancia de un mercado consumidor amplio.
- Mano de obra abundante y barata.
- La existencia de buenas infraestructuras de transporte.
- La disponibilidad de capitales o la capacidad para atraerlos.
- La existencia de sectores de apoyo: buenos equipamientos, empresas complementarias o de servicios, efecto aglomeración.
- La política industrial del estado, que puede favorecer la implantación industrial en determinadas áreas en detrimento de otras.
En el origen de la actividad industrial, el factor que más pesaba era la proximidad a los recursos naturales seguido de la existencia de importantes mercados de trabajo-consumo, de buenos sistemas de transporte…, lo que dio lugar a diferentes localizaciones:
- Zonas industriales de base extractiva junto a los recursos naturales.
- Zonas industriales de base portuaria, junto a los puertos que aseguraban la importación –exportación.
- Grandes aglomeraciones urbanas, que se convertían en importantes mercados consumidores.
Las pautas de localización industrial, se caracterizan por la concentración manufacturera en las zonas metropolitanas y al desarrollo de determinados centros industriales medianos-pequeños.
1.2. Los Nuevos Factores de Localización Industrial
Tras la crisis del petróleo, la industria dejó de ser la base del desarrollo económico. La crisis industrial de los años 70, y los cambios producidos por la III Revolución Industrial, alteraron de manera significativa los factores tradicionales y dieron lugar a otros nuevos.
Se observan cambios en los factores y en las tendencias de localización:
- Disminuye la importancia de los recursos naturales.
- La mejora de los transportes y las comunicaciones resta importancia a la distancia.
- La ampliación de las áreas de venta aminora la dependencia de los mercados locales.
- Disponibilidad de infraestructuras de calidad.
- Un medio ambiente de calidad, alejado de la congestión y la degradación de los espacios industriales.
- Necesidad de mano de obra cualificada.
Se ha iniciado un proceso de desconcentración industrial que afecta a los sectores maduros en crisis, como el textil, la química pesada o la metalurgia. Las industrias de alta tecnología presentan unas pautas de localización muy selectivas, con una tendencia creciente a situarse en las áreas centrales. El principal factor de localización industrial es el acceso a la innovación y a la información: proximidad a los centros de investigación en un entorno empresarial avanzado tecnológicamente. De ahí la proliferación de parques tecnológicos. La proximidad a los centros de innovación e investigación.
Con la proliferación de estos parques tecnológicos en todas las comunidades autónomas, podemos hablar de una cierta difusión industrial.
El desarrollo industrial de las dos últimas décadas, se ha conformado teniendo como epicentro un nuevo sistema técnico que gira en torno a la información. Cuatro pilares básicos sostienen dichos sistemas: la electrónica, la informática, las telecomunicaciones y la robótica. Cabe señalar la importancia de lo que se denominan “externalidades” que coinciden en resaltar la importancia de la diversidad productiva como factor dinámico, mientras que una estrecha especialización regional aparece como un factor regresivo.
Tipos de Áreas Industriales
- Áreas industriales desarrolladas: Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia, Sevilla o Zaragoza.
- Áreas y ejes industriales en expansión:
- Las coronas metropolitanas.
- Las franjas periurbanas.
- Los ejes de desarrollo industrial.
- Áreas y ejes industriales en declive.
- Áreas de industrialización inducida.
- Áreas de escasa industrialización.
2. El Proceso de Industrialización
2.1. El Inicio de la Industrialización (1800-1900)
2.2. El Crecimiento Industrial del Primer Tercio del S.XX (1900-1936)
Durante el primer tercio del S.XX se produjo un crecimiento industrial cuyas causas fueron: la disminución de las exportaciones de mineral, que favoreció su utilización por la industria nacional; el auge de la minería del carbón; el aumento de la inversión nacional procedente de la repatriación de capitales desde las colonias que se perdieron en 1898; y de los beneficios obtenidos de las exportaciones a Europa durante la I Guerra Mundial.
La dictadura de Primo de Rivera alentó el proteccionismo de la industria española frente a la competencia exterior, apoyó el desarrollo de numerosos sectores industriales básicos y favoreció la incorporación de los avances de la II Revolución Industrial. La localización industrial consolidó la hegemonía de los focos anteriores, salvo el andaluz, que agudizó su decadencia.
2.3. La Regresión y Autarquía Durante la Guerra Civil y la Posguerra (1936-1959)
La guerra fue una verdadera catástrofe económica. La regresión industrial entre 1936 y 1959 se produjo no solo por las destrucciones de la guerra, sino también por la política económica autárquica de la posguerra, que pretendía la autosuficiencia de la España franquista. Este objetivo trató de alcanzarse con una fuerte intervención del estado, que cristalizó en la creación del INI, que actuaba como sustituto de la empresa privada en actividades poco rentables o que requerían grandes inversiones. Se fomentó la industria por falta de competencia, pero también se frenó su expansión por la escasez de capitales, materias primas, fuentes de energía y maquinaria.
Así, se consolidó una estructura industrial caracterizada por la existencia de grandes empresas controladas por el estado (INI), concentradas en las costas cantábrica y mediterránea, y por pequeñas fábricas dispersas y escasamente rentables.
2.4. El Desarrollo Industrial (1960-1975)
Estos años, conocidos como los años del desarrollismo español, se caracterizaron por un enorme crecimiento industrial. Sus causas fueron:
- La expansión de la economía capitalista mundial.
- La llegada de capital exterior procedente del turismo y de las remesas enviadas por los emigrantes.
- El bajo coste de la energía.
- La liberalización de las importaciones.
- El interés del estado, que fomentó la industria a través de diferentes planes de desarrollo.
Así, la estructura industrial mejoró, aunque con importantes limitaciones.
La industria se concentraba en las grandes ciudades y en sus áreas metropolitanas, aunque surgieron otros nuevos centros industriales congestionados y, sobre todo, por la política de polos que favoreció la instalación de industrias en algunas ciudades.
3. La Crisis y la Reestructuración Industrial (1973-1990)
A partir de 1973 asistimos a una reducción del empleo industrial, al tiempo que la mayor mecanización de las industrias lleva a un crecimiento de la producción.
3.1. La Crisis Industrial
La crisis industrial afectó a todos los países desarrollados al coincidir con una crisis política. Las causas de la crisis fueron externas e internas:
- Las causas externas están relacionadas con la “crisis del petróleo” y el encarecimiento de una fuente de energía hasta el momento abundante y barata. Esta crisis energética puso de manifiesto el agotamiento del ciclo tecnológico anterior y el inicio de otro nuevo: la III Revolución Industrial. Esta nueva revolución se asentó sobre las bases de unas nuevas tecnologías que dejan anticuadas las anteriores. Los nuevos sectores industriales derivados de ellas requerían la innovación permanente y la mayor diversificación de los productos que no todas las empresas podían abordar. La industria española se vio inmersa en un imparable proceso de globalización económica, que fomentaba la división internacional del trabajo, en la que cada territorio se especializa en aquellos sectores industriales para los que contaba con mayores ventajas.
- Entre las causas internas destacan las deficiencias estructurales de la industria española: la desfavorable especialización en sectores maduros, muy consumidores de energía y trabajo, la insuficiente modernización tecnológica, la elevada dependencia exterior. La muerte de Franco y la transición política retrasaron las políticas económicas.
3.2. La Reestructuración Industrial
La reestructuración industrial tiene dos vertientes complementarias: la reconversión industrial y la reindustrialización.
La reconversión industrial supuso la canalización de recursos públicos hacia los sectores y actividades más rentables y con mejor futuro, y el abandono de aquellas escasamente rentables o deficitarias.
Los sectores más afectados fueron inicialmente los sectores maduros, como el siderometalúrgico, la construcción naval, la química pesada, electrodomésticos, textil y calzado. Como consecuencia de la política de reconversión industrial, se produjeron cierres de empresas poco rentables, regulación de plantillas y jubilaciones anticipadas.
La reindustrialización supuso las modernizaciones tecnológicas de los sectores que, sometidas a reconversión, presentasen una clara viabilidad y la creación de nuevas actividades que diversificasen la industria de zonas hasta entonces muy especializadas y que generasen empleo. Se crearon Zonas de Urgente Reindustrialización (ZUR) y las Zonas Industrializadas en Declive (ZID).
- Las ZUR tenían un periodo de vigencia de 18 meses. Se delimitaron 6 ZUR: Galicia, Asturias, País Vasco, Barcelona, Madrid y Andalucía, que englobaron un total de 80 municipios.
- Las ZID, sustituyeron a las ZUR al aprobarse la nueva Ley de Incentivos Regionales de 1985. La reindustrialización estimuló la inversión y la diversificación industrial de zonas antes muy especializadas, pero también se demostró que esas ayudas eran insuficientes.
4. Nuestra Incorporación a la CEE
Nuestra incorporación a la CEE provocó y aceleró el proceso de reconversión industrial y exigió una nueva reconversión industrial en 1991.
El impacto sobre la industria española se resume en cuestiones económicas y ambientales:
- Entre las económicas destacan algunos aspectos negativos: la creciente competencia exterior potenciada por la desaparición de aranceles, los equipos se vuelven obsoletos con gran rapidez, el encarecimiento de los costes de producción, la tradicional industria familiar entra en dificultades al competir con las multinacionales que se consolidan en el país. Como aspectos positivos, cabe señalar los siguientes: fomento de la concentración y de acuerdos entre empresas, disminución de la dependencia tecnológica gracias a la participación en programas internacionales, llegada de ayuda financiera a las regiones más desfavorecidas.
- Relacionadas con las cuestiones ambientales, podemos destacar la desaparición de algunas industrias básicas cercanas a las viviendas.
La Tercera Revolución Industrial y los Cambios Actuales en la Industria
La reestructuración industrial no ha terminado y la crisis sigue afectando a muchos sectores, tras ella, se abre una nueva fase marcada por los cambios que ha supuesto la III Revolución Industrial. Esta se basa en la innovación y en las tecnologías de la información, es decir, en la aplicación de los nuevos conocimientos proporcionados por la investigación: la mejora de los procesos productivos, la obtención de nuevos productos, la mejora de la gestión y la incorporación de la informática y las telecomunicaciones.
Esta revolución tecnológica, ha provocado el crecimiento de los sectores industriales intensivos en el uso de la microelectrónica. Estos sectores, se identifican con la alta tecnología, son la informática, las telecomunicaciones, la automatización. Además, los avances de estas actividades afectan también a industrias tradicionales que las incorporan a su proceso productivo.
5. La Industria Española Actual
El sector industrial representa más del 16% del PIB, y comprende tres grandes ramas de actividad: manufacturera, extractiva y producción de energía.
En España, de 1997 a 2007, puede hablarse de recuperación industrial, debido al incremento de la demanda y la disminución de stocks, el aumento de la producción, crecimiento del empleo y aceleración de las importaciones y de las exportaciones. Cinco comunidades aportan el 65,5% del total de la cifra de negocios del sector industrial: Cataluña, C. de Madrid, C. Valenciana, Andalucía y País Vasco.
Actualmente, asistimos a una desaceleración de la actividad productiva ligada a la crisis inmobiliaria, a la construcción y a la subida del tipo de interés.
5.1. Principales Sectores
El capital multinacional tiene mucho peso en la industria española, controla subsectores como el del automóvil, y tiene una fuerte participación en la industria agroalimentaria y química.
La Industria Agroalimentaria
Es el primer sector industrial del país. El minifundismo empresarial ha sido la nota dominante, en los últimos años se tiende hacia la concentración. Pese a la presencia en el sector de empresas multinacionales extranjeras, en este proceso de concentración están teniendo un fuerte protagonismo otros grupos con mayoría de capital nacional. Las transformaciones cada vez son mayores, llegando a la comida precocinada. Estas industrias se localizan en las regiones agrícolas y los puertos pesqueros, ya que es más barato transportar el producto elaborado que la materia prima.
La Industria Automovilística
La producción española de vehículos nos coloca como el tercer constructor en Europa y el 5º a nivel mundial. Se trata de la segunda industria del país. Uno de los rasgos más característicos es la hegemonía del capital exterior, a través de la progresiva penetración de grandes empresas multinacionales. Esta situación, coloca a esta rama de actividad en una situación crítica ante los nuevos procesos de deslocalización.
La Industria Química
La mayor parte de los productos químicos se destinan a otras industrias que precisan de ellos como materias primas. Esta industria ha venido creciendo en volumen. En 2006, la industria química española triplicó el crecimiento registrado por la química europea. Las causas de este crecimiento radican en el aumento de la demanda interna de productos químicos. La industria química española se encuentra localizada principalmente en Cataluña.
5.2. Los Problemas Tradicionales
Entre nuestros principales problemas destacan:
- La escasez de recursos energéticos, que origina la dependencia del suministro exterior de energía.
- La baja productividad, debido al excesivo trabajo humano respecto a la mecanización.
- El escaso desarrollo técnico. Dependencia tecnológica exterior.
- Escasa iniciativa privada y de la inversión.
- Minifundismo empresarial. Reducido tamaño de nuestras empresas.
- Las grandes empresas son un elemento fundamental en la estructura de la producción.
- Desequilibrio espacial, con la mayor parte de las industrias localizadas en 6 provincias.
- Desequilibrio sectorial, con un excesivo peso del subsector de la construcción.
5.3. Los Nuevos Problemas
La investigación en nuestro país es muy escasa, así que deberían invertir mucho más para intentar paliar de alguna manera nuestra dependencia tecnológica exterior.
En primer lugar, se pretende apoyar la creación de infraestructuras técnicas e industriales de uso común o compartido. En segundo lugar, se apoya el arranque y ejecución de iniciativas industriales generadoras de empleo que desarrollen actividades de contenido tecnológico. A partir de 2005, el programa se ha adaptado para hacer frente a nuevas realidades como los fenómenos de deslocalización en los sectores textil-confección, mueble, juguetes. La deslocalización se empieza a vislumbrar como una práctica habitual y peligrosa, que afecta sobre todo a sectores intensivos en mano de obra y empresas de tecnología de la información y la comunicación.
Nuestra política en el terreno industrial ha estado encaminada en las dos últimas décadas a desmantelar el sector público empresarial, a implantar la política de liberalizaciones a impulsar la política tecnológica que nos aleja de los primeros puestos en competitividad a nivel tecnológico en los mercados internacionales, ante la asignación de esfuerzos presupuestarios insuficientes.
El futuro de la industria española dependerá en gran medida de la capacidad de nuestras empresas para invertir en I+D, atraer inversión extranjera, ser capaces de sortear la crisis económica y salir fortalecidas de la misma para continuar siendo competitivos en el futuro.
El gasto español en I+D del 1,2% del PIB, cuando el esfuerzo medio de los países de la OCDE se sitúa en el 2,5%, resulta a todas luces insuficiente en un país que sufre todavía un importante retraso tecnológico en comparación con los demás países de nuestro entorno. Las actividades de I+D deberían dirigirse hacia las necesidades empresariales, puesto que existe una gran desconexión entre los entes públicos de investigación y la iniciativa privada, desconexión que impide que la investigación básica se transforme en innovaciones de carácter productivo.
5.4. El Excesivo Peso de la Construcción en Nuestra Economía
La construcción ha sido en los últimos años el sector más dinámico y de mayor crecimiento de nuestra economía, debido a que tiene un elevado contenido de consumos intermedios. Este crecimiento ha tenido un claro reflejo en el empleo del sector, que ha crecido hasta superar el 14% del total de ocupados.
La industria no ofrece perspectivas de actuar como relevo de la construcción.
Los Espacios de Servicios
1. Redes y Transportes
1.1. Redes y Sistemas de Transportes
1.2. Rasgos Generales de los Transportes en España
- Factores físicos: El transporte se ha visto condicionado por:
- El relieve: El transporte terrestre tiende a eludir las dificultades orográficas siguiendo valles, vados de ríos, etc., lo que supone menor densidad de la red y mayores esfuerzos inversores para su desarrollo y conservación.
- El clima: Afecta negativamente a todos los tipos de transportes, tanto al terrestre, como al transporte aéreo produciendo retrasos y cancelaciones de vuelos.
1.3. Incidencia de los Transportes en la Vertebración Territorial
Es evidente la concentración espacial del tráfico en la costa y el cuadrante nordeste. En el transporte interior, el medio más importante es la carretera, el ferrocarril ocupa el 2º lugar y el aéreo, el tráfico interior de mercancías.
La navegación marítima tiene una enorme importancia en el transporte exterior de mercancías. El avión se limita prácticamente al servicio de personas.
1.4. El Transporte por Carretera
Es el sistema de transporte más importante de España. Su ventaja principal es la flexibilidad horaria. Su principal problemática deriva de la congestión que genera, del impacto medioambiental y de las inversiones necesarias para mantener y mejorar el trazado de las redes. La red nacional de carreteras se ha constituido y desarrollado a lo largo del S.XX. Entre las características se pueden distinguir tres tipos:
- Nacionales: gestionadas por el estado.
- Regionales: gestionadas por las comunidades autónomas.
- Locales: en manos de las diputaciones provinciales.
Las comunidades de Madrid, Andalucía, Cataluña y Comunidad Valenciana ocupan los primeros puestos en cuanto a matriculación. Los menores índices se corresponden con Extremadura, Ceuta y Melilla, La Rioja, Navarra y Cantabria.
1.5. El Transporte Ferroviario
El ferrocarril está en retroceso y ha seguido una evolución dado que España es el único país del continente que cuenta con tres anchos de vía: ancho internacional, ancho ibérico y ancho métrico. Su explotación económica se caracteriza por los elevados costes y fuertes pérdidas. La disposición orográfica española también se ha convertido en un inconveniente importante para el desarrollo del ferrocarril. La red de ferrocarriles es también radial, con centro en Madrid, de donde parten cinco troncos fundamentales: Madrid a Venta de Baños, Madrid a Zaragoza, Madrid a Alcázar de San Juan, Madrid a Portugal, y Madrid-Valencia.
El ferrocarril tuvo un papel importante en el desarrollo económico español del S.XIX y la primera mitad del S.XX. Desde 1941, la empresa estatal RENFE se ocupó de la gestión de todos los ferrocarriles de ancho normal (ibérico e internacional) y FEVE de la vía estrecha (ancho métrico).
En la actualidad el ferrocarril está en crisis, pero nuestros trenes son lentos y no son competitivos con la carretera. Su futuro pasa por potenciar el transporte de cercanías en las áreas metropolitanas de las grandes ciudades, el transporte de viajeros a distancias medias y las líneas de alta velocidad (AVE).
Se han acometido actuaciones de especial importancia para el ferrocarril español:
- En el año 2007 entró en servicio el nuevo tramo del AVE Madrid-Valladolid, que ha reducido la distancia y el tiempo de viaje.
- En 2008 se inauguró el nuevo tramo Tarragona-Barcelona en ancho europeo.
1.6. El Transporte Marítimo
Por esta vía de transporte se realizan el 50% de las exportaciones, el 85% de las importaciones y el 15% de las transacciones internas. Varios factores hacen de este medio de transporte un elemento básico de la economía española:
- El bajo coste de sus tarifas.
- Su gran capacidad de carga y la independencia de las líneas.
- España es el país de la Unión Europea con mayor longitud de costa.
- Por su situación geográfica, como encrucijada entre dos mares y dos continentes.
1.7. El Transporte Aéreo
Se utiliza para el transporte de pasajeros. El 4% del tráfico pertenece a desplazamientos interiores, y cerca del 25% a internacionales. En la actualidad está alcanzando nuevos usos, como el transporte de mercancías perecederas de alto valor.
España cuenta con 48 aeropuertos, y 7 son los más importantes: Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, Málaga, Gran Canaria, Alicante y Tenerife Sur. La mayor parte de los aeropuertos españoles deben sus movimientos al turismo.
Las razones que favorecen este medio de transporte son:
- La situación de España en una encrucijada entre África, Europa y América.
- La rapidez y los largos desplazamientos.
- El gran atractivo turístico de nuestro país.
- Los contactos por negocios, turismo, etc.
La compañía Iberia es el principal grupo de transporte aéreo español y ocupa el 4º lugar en Europa. Actualmente, mantiene vuelos con más de 40 países, gracias a una moderna flota de aviones. Destaca el tráfico internacional con Europa.
2. El Comercio Interior e Internacional en España
2.1. El Comercio Interior
El comercio interior, como intercambio entre los residentes en un mismo país, constituye una de las actividades básicas de la vida económica española. Como características principales del comercio interior destacamos:
- Su mayor concentración en las principales áreas urbanas, donde se concentra mayor número de habitantes con renta per cápita más elevada.
- El comercio tradicional presenta una atomización, con pequeñas empresas de tipo familiar, con pocos empleados y escasamente especializado.
- El comercio moderno lo imponen las grandes superficies comerciales: supermercados, hipermercados y grandes almacenes.
- Están surgiendo nuevas formas de comercio que cada vez logran mayor cuota de mercado, como el comercio electrónico.
- Las encuestas sobre los presupuestos familiares señalan que los gastos de consumo en España atienden, por orden decreciente, a la alimentación, la vivienda, el transporte, etc.
2.2. El Comercio Exterior
El comercio exterior es una exigencia de la moderna economía mundial, basada en el principio de división internacional del trabajo, donde cada país está especializado en la producción de unos bienes concretos que vende a otros países.
En los últimos tiempos, la creciente globalización de la economía y la entrada de España en la UE han contribuido a aumentar el peso de nuestras importaciones y exportaciones.
Destacan sobre todo los sectores de alimentación, bienes de equipo, productos químicos y sector del automóvil.
3. El Turismo en España
El movimiento temporal fuera de la residencia habitual de las personas, tanto las actividades realizadas durante su estancia, como las instalaciones creadas para atender sus necesidades. El turismo está condicionado por diversos factores:
- Físicos (paisajes, climas,…)
- Humanos (comunicaciones, hoteles, servicios,…)
- Económicos (relación calidad-precio)
- Culturales (tradiciones, patrimonio histórico)
- Políticos (planificación, seguridad,…)
Las principales modalidades del turismo son:
- Litoral: suele ocasionar desplazamientos de entre una y cinco semanas en verano.
- Cultural: visita a países, regiones o ciudades de rico patrimonio histórico.
- Invernal: relacionado con la práctica de los deportes de invierno o nieve.
- Rural: desde la ciudad al campo, en casas de labranza tradicionales o en residencias secundarias.
- Verde o ecoturismo: conocimiento de espacios naturales de interés ecológico.
Se ha convertido en la principal fuente de ingresos para la economía española y en factor clave de nuestro desarrollo económico.
El turismo mantiene un peso fundamental dentro de los ingresos de la balanza de pagos. Las transformaciones más recientes que ha tenido el sector son:
- Aunque el turismo es muy estacional, en los últimos años se está diversificando la oferta turística.
- La generalización del uso de compañías aéreas de bajo coste.
- La expansión del uso de Internet.
- También destaca el incremento de los pagos directamente ligado al desarrollo del comercio electrónico en la red.