1. Factores que influyen en el clima de España

1.1 Factores Geográficos

España tiene una gran diversidad de tiempos atmosféricos y climas. Está al suroeste de Europa, entre dos continentes y dos masas de agua. Su latitud hace que el periodo diurno sea bastante largo. La proximidad a la zona subtropical confiere a sus climas un carácter cálido, debido a la influencia del anticiclón de las Azores. España es, además, el acceso a Europa de las borrascas atlánticas.

Otro factor es la elevada altitud media (650m). El gradiente térmico vertical, la variación de la temperatura en función de la altitud, registra una pérdida de 0,65 ºC cada 100m. El relieve condiciona el clima. Los sistemas costeros son una barrera para las borrascas, las cuales llegan muy débiles si consiguen superarlos y no llevan grandes lluvias al sureste (climas áridos). Las zonas más lluviosas de España están a barlovento del aire con humedad, donde las montañas propician las precipitaciones. La posición del relieve produce el efecto Foehn en tierras a sotavento de estos flujos, donde suben las temperaturas y baja la humedad relativa; y por otro lado impide la llegada de aires fríos al sur.

La cercanía al mar influye en la temperatura y la humedad de las zonas costeras. En el norte, la Corriente cálida del Golfo mantiene las temperaturas sobre los 11ºC. El mar Mediterráneo registra altas temperaturas, por lo que la media anual en la costa es suave. Esto favorece la gota fría, con episodios de lluvias torrenciales. La lejanía del mar favorece la continentalidad, con grandes variaciones de temperatura de verano a invierno y escasas precipitaciones.

1.2 Factores termodinámicos

En cuanto a la circulación atmosférica, la península y Baleares están en una latitud intermedia entre las borrascas atlánticas, más importantes entre el otoño y la primavera, y el anticiclón de Azores, más fuerte en verano. España se encuentra en la zona de equilibrio en el sistema de balance energético planetario. Durante el invierno, las masas de aire frío son dominantes y se desplazan hacia el sur, creando inestabilidad y temperaturas frías. En verano, el aire cálido se desplaza hacia el norte, con un tiempo seco y soleado.

España se ve además afectada por masas de aire de distinta procedencia:

• Masa de aire polar:
  • Marítima: procede del Atlántico norte, con elevada humedad, frentes fríos y precipitaciones.
  • Continental: llega de Europa en invierno, con un aire frío y seco, olas de frío y a veces nieve.
• Masa de aire tropical:
  • Marítima: se genera en el Atlántico subtropical, con altas temperaturas y elevada humedad.
  • Continental: se origina en el Sahara, con un aire cálido y seco.

Los frentes son superficies que separan masas de aire con distinta temperatura. En España es frecuente el frente polar, que separa la masa tropical y polar, lo que provoca inestabilidad y precipitaciones.

2. Tipos de tiempo

La circulación atmosférica da lugar a la creación de diversas situaciones atmosféricas a lo largo del año, que constituyen los tipos de tiempo:

• Invierno: Predomina el tiempo estable, frío y seco, causado por anticiclones del interior de Europa y del Atlántico. Sin embargo, el descenso en latitud de la corriente en chorro y el anticiclón de las Azores permite la entrada del frente polar y de las borrascas atlánticas.
• Verano: Predomina el tiempo estable, caluroso y seco, causado por el anticiclón de las Azores y el del norte de África.
• Otoño y Primavera: Tiempo inestable, con situaciones anticiclónicas y precipitaciones ligadas bien al paso de las borrascas atlánticas o a situaciones como la gota fría.
• Canarias: Tiempo estable determinado por el anticiclón de las Azores y el viento alisio del nordeste, fresco y húmedo. En invierno el aire polar marino causa precipitaciones y en verano el aire del Sahara trae calor seco.

3. Diversidad de climas en España

3.1 Clima oceánico

El clima oceánico comprende el territorio abierto al Atlántico: el litoral cantábrico, Galicia y Andalucía occidental. Está determinado por las borrascas oceánicas, reducida amplitud térmica, inviernos suaves y veranos frescos. Tiene los mayores totales de precipitación de España, distribuidas de modo regular. Está influido por el viento de poniente.

También se encuentran otras variedades:

• Variedad de transición: La influencia oceánica es menor, menos lluvias, veranos más secos, inviernos fríos.
• Variedad de montaña: (*)

Vegetación

Condiciones favorables para el desarrollo de suelos y del bosque caducifolio de hayas y robles. Existen diferencias entre los sectores litorales, donde la influencia del mar incide en la organización de la vegetación y fauna y las zonas de montaña organizadas en pisos bioclimáticos en función de la altitud y exposición. Las zonas donde la vegetación ha pervivido en buen estado, se extienden bosque cerrados. Muchos de estos bosques son mixtos, combinándose robles, hayas y coníferas aunque la mayoría han sufrido transformaciones humanas para implantar cultivos y pastos.

3.2 Clima mediterráneo

El clima mediterráneo se localiza en la franja litoral abierta al Mediterráneo. Las borrascas son débiles, siendo pues las precipitaciones escasas, a excepción de otoño (gota fría), y sobre todo en verano, con sequía y aridez. Cuentan con la influencia del viento de Levante, y ligeramente del de Poniente, Cierzo y Tramontana; y del mar en las temperaturas, generalmente suaves.

Se dan las siguientes variedades:

• Variación Mediterránea de influencia atlántica: (Tarifa-Guadiana, Extremadura y Guadalquivir) Precipitaciones abundantes, veranos secos y calurosos, más suaves en la costa.
• Variación seca con menos de 400mm de precipitaciones anuales: Clima seco con índices altos de aridez, lluvias escasas, irregulares y torrenciales; y altas temperaturas.
• Variedad de montaña: (*)

Vegetación

1. Franja litoral y las Baleares: franja costera muy variada, rocosa acantilada en ocasiones, y arenosa en otras con gran interés ecológico. En el litoral catalán, valenciano y balear conviven encinares mediterráneos con áreas cubiertas de coscojares o de maquia. En el litoral murciano-almeriense, predomina una vegetación y fauna adaptadas a condiciones prácticamente desérticas.
2. Meseta y depresiones: presentan rasgos de continentalidad, desde antigüedad, fueron transformadas para implantar cultivos y pastos pero aun conservan ejemplos significativos de sus bosques originales de encinares, coscojares… y en las áreas de mas continentalidad rebollares o quejiguares con mayor altitud y humedad. La vegetación en los ríos como las Tablas de Daimiel, su vegetación son los bosques de ribera.

3.3 Clima Continental

El rasgo principal del clima de interior es la continentalidad, con una elevada amplitud térmica, veranos calurosos e inviernos fríos. Pocas precipitaciones, por el paso de borrascas atlánticas debilitadas, sobre todo en invierno y primavera, con veranos secos.

Variedades:

• Variedad de inviernos largos y fríos con veranos cortos secos y moderados: Se da en la Submeseta Norte, con calor sólo en verano, un alto índice de aridez. La lluvia es escasa, y en ocasiones son comunes la niebla y las heladas.
• Variedad del dominio del Cierzo: Se da en la depresión del Ebro. Temperaturas más moderadas que el anterior y menores precipitaciones, al recibir la influencia del Cierzo, viento seco y frío en invierno.
• Variedad de la Submeseta Sur: Mismas características que la anterior pero sin la influencia del Cierzo.
• Variedad de montaña: (*) VEGETACION (CLIMA MED 2.MESETA)

3.4 Clima Subtropical

El clima subtropical afecta a las Islas Canarias por la influencia constante del anticiclón de las Azores y de los vientos alisios, predominando la estabilidad. Las lluvias se concentran en invierno y primavera con la llegada de borrascas atlánticas, y el calor en verano con el aire sahariano.

Variedades:

• Variedad de costa: Tiene una amplitud térmica muy poco elevada (18-21 ºC) y unas precipitaciones muy escasas.
• Variedad de medianías: Sólo presente en islas montañosas, con 500-1000 mm de precipitaciones y menores temperaturas.
• Variedad de montaña: Temperaturas anuales inferiores a 12ºC y 500mm. Recibe mucha insolación.

Vegetación

En la mayor altitud, desde la costa hasta la cumbre, se suceden las comunidades vegetales adaptadas a condiciones subdesérticas; bosques perennifolios dominados por laureles que ocupan las zonas más húmedas de medianías; o hacia las cumbres, los pinares y matorrales leguminosos. +de 2400 m vegetación de alta montaña. Islas han sido intensamente explotadas y ha supuesto la desaparición de algunos ecosistemas y profunda alteración de otros.

3.5 Clima de Montaña

El clima de montaña comprende aquellos puntos por encima de los 1000m. El relieve aumenta las precipitaciones y disminuye las temperaturas en 0,6ºC cada 100m de ascenso.

Vegetación

En España solo están los Pirineos con una disimetría entre su vertiente norte, más húmeda, y la sur, donde la pluviometría es menor, así como la extensión de las masas arbóreas, por ello los rasgos ecológicos característicos de la alta montaña es en el pirineo central por las mayores altitudes.

4. Elementos del clima: Contrastes pluviométricos y tipos de precipitación

4.1 Contrastes pluviométricos en España

Existen tres grandes áreas pluviométricas:

• La España lluviosa: Ocupa fundamentalmente y con continuidad casi todo el norte y noroeste de la península, el norte de Castilla-León, y la zona pirenaica y prepirenaica. Los valores medios de precipitación anual son de 800 mm, pero se registran zonas de 2000 mm, pues existen zonas más expuestas a flujos marítimos. Existen zonas en cordilleras y sierras insulares y peninsulares que entran en esta zona.
• La España seca: Es la más extensa de las tres áreas distinguidas. Ocupa las tierras llanas de las dos mesetas y de la cuenca del Ebro, la depresión del Guadalquivir y la fachada oriental ibérica (excepto la sureste). En la Meseta, la lejanía del mar, y la existencia de cordilleras periféricas impide que lleguen los vientos húmedos marítimos excepto las borrascas muy profundas.
• La España semidesértica: Tiene su principal área en el sureste (Murcia y Almería), además de la cuenca del Ebro y del Duero. Además de todo el archipiélago canario por culpa de su naturaleza volcánica.

4.2 Tipos de precipitación

Existen también tres zonas de precipitación diferente:

• Dominio atlántico: La precipitación máxima se produce en invierno aunque hay zonas en Galicia donde es en otoño, y se convierte julio en verano el mes más seco de todos a pesar de que las lluvias se manifiesten durante todo el año. Esto tiene una consecuencia muy importante y es el elevado manto vegetal.
• Dominio mediterráneo: Presenta su máximo en otoño seguido de la primavera. En verano, el índice de precipitaciones es muy bajo, aunque lo es también en general.
• Dominio interior: Presenta un mayor aislamiento de las corrientes marinas, y se producen marcados contrastes a lo largo del año. En las dos mesetas, el máximo ocurre durante la primavera y el mínimo en verano. En cambio es normal encontrar acumulación de aire frío, lo cual provoca que en ocasiones, el mínimo se pase al invierno.

5. El suelo

El suelo es el componente básico de la vida en el planeta. Está formado por la combinación de partículas de minerales y rocas, materia orgánica, aire y agua.

Los suelos son el resultado de las interacciones que a lo largo del tiempo se producen entre los componentes minerales de la naturaleza y los seres vivos.

A medida que transcurre el tiempo la combinación de diferentes procesos permite que en un suelo se diferencian horizontes, es decir, distintos niveles que presentan características físicas, químicas y biológicas diferencias.

Horizontes del suelo

• Horizonte A: es el más próximo a la superficie. En él abunda la materia orgánica descompuesta (humus).
• Horizonte B: es el nivel donde se acumulan los materiales que desde el horizonte A son transportados por el agua de forma mecánica o en disolución, mediante procesos de lixiviación e iluminación.
• Horizonte C: se corresponde con el material rocoso sobre el que se ha formado el suelo. Presenta signos de meteorización mecánica y química.
• Roca madre ni meteorizada: es el material rocoso subyacente que todavía no ha sido alterado de forma significativa.

Factores que influyen en los suelos

Existe una amplia diversidad de suelos, dependiendo de las condiciones topográficas del tipo de roca sobre el que se ha originado, del tiempo transcurrido, de las condiciones climáticas, de la vegetación y de las actividades humanas que se desarrollan en los mismos.

Factores climáticos

• La luz solar: es fundamental en la nutrición de las plantas, por lo que estas desarrollan mecanismos para adaptarse a las variaciones lumínicas. Si las plantas ocupan zonas sombrías desarrollan estrategias para favorecer la captación de luz como hacen las especies esciófilas. El número de horas de sol incrementa en España de modo que nos acercamos al sur peninsular por lo que allí es donde predominan las especies heliófilas.
• La temperatura: y sus variaciones estacionales son otro de los factores que determinan la distribución de las plantas. El calor solar es necesario para desencadenar una serie de procesos químicos en las especies vegetales.
• El agua: es un factor esencial en la distribución de la vegetación. La disponibilidad de recursos hídricos o su déficit, su estacionalidad, su contenido en sales o nutrientes, el estado en el que se presenta son aspectos que influyen directamente en el tipo de vegetación que se desarrolla en el área. Se adaptarán en zonas en las que el agua sea abundante especies hidrófilas como los sauces mientras que en las regiones más secas predominarán las especies xerófitas.

Factores edáficos

Entre el suelo y la vegetación se producen una gran cantidad de interacciones, condicionándose mutuamente. Unas especies como el roble por ejemplo necesitan suelos profundos para instalarse mientras que otras se bastan con suelos con unos pocos centímetros de suelo como los pinos.

Factores topográficos

La configuración del relieve puede condicionar muchos de los factores señalados anteriormente. Las variaciones de las condiciones ecológicas con la altitud explican que la vegetación se distribuya en diferentes pisos bioclimáticos al tiempo que las diferencias de exposición o los vientos dominantes propician contrastes entre las plantas situadas a barlovento o sotavento del mismo.