Problemas de la Industria Española
Problemas comunes de la industria del país:
- Concentración espacial: Uno de los principales obstáculos a los que debe hacer frente la industria española es la existencia de grandes desequilibrios territoriales, incapaces de solucionar las distintas políticas estatales.
- Poca disponibilidad de capitales propios: El tamaño medio de las empresas españolas es escaso. Muchas empresas dependen para su financiación de créditos bancarios o capital extranjero y, de empresas multinacionales. Son empresas poco preparadas para resistir crisis.
- Aguda diferencia en el desarrollo tecnológico: Las industrias con más requisitos tecnológicos y mayor eficiencia comercial, suelen asentarse en las zonas industriales más dinámicas, como Madrid y el entorno de Barcelona. Las tecnológicamente más precarias se asientan en regiones con escasa densidad industrial.
- Escasa presencia de I+D+I (Investigación+Desarrollo+Innovación): Las patentes explotadas en las industrias españolas son de titularidad extranjera, lo que supone el pago de grandes cantidades por su uso. Algunos sectores avanzados y muy rentables, como la industria aeronáutica, la de generación eólica, la de superconductores o la domótica son de implantación muy reciente y débil. España es uno de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con menor inversión en I+D+I.
- Deficiencias en la red de comunicación y transporte: Encarecen los gastos de traslado de los productos. La implantación de trenes de alta velocidad o las mejoras en los puertos y aeropuertos son cruciales. El relieve español es un factor adverso para una integración industrial regional o nacional.
- Escasez y mala calidad de las materias primas y las fuentes de energía: La dependencia del petróleo y la importancia de otras muchas materias primas generan la necesidad de efectuar altas inversiones y son algunas de las causas de que la balanza comercial sea deficitaria.
- Tamaño medio de las empresas: El tamaño medio de las empresas españolas es pequeño. Un modelo de empresa con pocas posibilidades de reinvertir para optimizar su producción, en abaratar costes productivos o en mejorar sus canales de comercialización.
- Uso de tecnologías atrasadas e instalaciones deficientes: Su mecanización sea insuficiente, lo que eleva considerablemente los costes de la mano de obra y que los precios resulten poco competitivos.
- Problemas derivados del marco económico general: La elevada inflación provoca también pérdida de competitividad.
Las Actividades Terciarias
Distribución regional del sector terciario
Elevada presencia de población en el sector terciario:
- Madrid: La capitalidad administrativa, provoca que trabajen numerosos funcionarios. Muchas empresas financieras, de ocio o de comunicación buscan un amplio mercado como la proximidad a otros sectores económicos. El 70% de la población de la comunidad trabaja en el sector. Además es notable el porcentaje de trabajadores de sectores terciarios avanzados, como consulting (servicios de consultoría), marketing, formación especializada o telecomunicaciones.
- Otras grandes ciudades: Barcelona, Valencia, Sevilla y Bilbao tienen iguales condiciones, con porcentajes similares de población en el sector terciario.
- Baleares y Canarias: El turismo provoca una elevada concentración de trabajadores en el sector o en sectores auxiliares (como el comercio).
- Las capitales autonómicas y de provincia: Las administraciones municipales y provinciales conllevan la existencia de un número importante de funcionarios, generalmente en servicios especializados, como los servicios sanitarios o las universidades. Los centros de ocio y las grandes superficies comerciales aportan numerosos trabajadores al sector.
Las comunidades con menos desarrollo del sector terciario son las que presentan un elevado desarrollo de la agricultura o la industria: Castilla-La Mancha, La Rioja, Navarra o Cantabria.
Comercio Exterior
El principal destinatario del comercio exterior español son los países de la UE, especialmente Francia, Alemania, Portugal e Italia. España obtiene casi el 65% de sus importaciones. Factores clave en el crecimiento del comercio exterior español han sido la adopción del euro y la libre circulación de personas, mercancías y capitales entre los países miembros de la UE.
En segundo lugar en cuanto a importancia comercial, se encuentran los países de Hispanoamérica, Estados Unidos, Japón y los países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Destacan sectores como el de maquinaria, automóviles y alimentos. Las importaciones se concentran especialmente en maquinaria y equipamiento, productos químicos y combustibles, alimentos y bienes de consumo.
Uno de los grandes problemas de la economía española es que presenta una balanza comercial negativa: el valor de los productos que España exporta es inferior al valor de los que compra en el extranjero. España ha pasado a ser un país atractivo para la inversión extranjera.
Sector Público y Gasto Público
- Sector público: Se considera sector público a las empresas que dependen de las distintas administraciones central, autonómica y local.
- Gasto público: Es la inversión realizada por las administraciones en sectores como las pensiones, la sanidad, la defensa, la seguridad o la educación. En España el estado de bienestar se encuentra muy desarrollado y mantiene una alta calidad en sectores como la sanidad pública. Uno de los principales gastos estatales es el dedicado a pensiones y al desempleo. Cada año el número de pensionistas se ha venido incrementando un 4 – 5%. El sistema sanitario español garantiza que toda persona tiene derecho a la atención sanitaria de forma gratuita.
Ocio y Turismo
El aumento del nivel adquisitivo y la importancia del turismo en España han generado la proliferación de parques de ocio, cadenas de comida rápida, centros de deporte y espectáculos deportivos, etc. La cultura culinaria española ha contribuido al desarrollo de numerosos restaurantes de reconocido prestigio internacional (como el Bulli de Ferran Adrià en Barcelona). El servicio del ocio es desarrollado por centros comerciales.
España es un país con un amplio desarrollo del sector turístico, que ha generado un importante volumen de desplazamientos internos e internacionales y la generación de una importante aportación económica. El turismo español ha sido tradicionalmente el de «sol y playa», concentrado en puntos costeros. Además ha generado efectos adversos, como un urbanismo en las costas dañino respecto al medio ambiente. Grandes instalaciones hoteleras o de apartamentos y casas demasiado próximas a la costa, o grandes exigencias de agua durante la canícula en las zonas turísticas, son consecuencias negativas de este modelo turístico.
El turismo tradicional se ha visto completado en España por otros atractivos, como lugares de singular valor paisajístico, las estaciones de esquí o las ciudades de interés patrimonial. España cuenta con numerosas ciudades declaradas Patrimonio de la Humanidad. El turismo de interior cuenta con pocas pernoctaciones y sigue siendo muy dependiente del turismo de costa.