Paisaje vegetal del clima oceánico
Bosque caducifoleo, constituido por árboles altos de hojas caducas como roble y haya. En formación secundaria: castaño, fresno, tilo, olmo y avellano. El sotobosque tiene helechos y musgos. El haya se adapta a suelos calizos y silíceos, tolera mal el calor y requiere mucha humedad. El roble, de crecimiento lento, se emplea para muebles. El castaño permite aprovechar su fruto y madera. En zonas oceánicas aparecen especies como rebollo y quejigo.
Paisaje vegetal de clima mediterráneo
Predomina una vegetación xerófila, adaptada a la sequía estival. Bosque perennifolio formado por árboles de media altura como encina, alcornoque y pino. La encina resiste la sequía y se adapta a todo tipo de suelos. El alcornoque necesita inviernos suaves y su madera es dura.
Paisaje vegetal de montaña
Representado por los Pirineos. Piso basal, piso subalpino, piso alpino y piso nival. Crecen musgos y líquenes en zonas nivales.
Paisaje vegetal canario
Con influencias mediterráneas, africanas y del Atlántico sur. Gran cantidad de especies endémicas. Desde el nivel del mar hasta 300-500m predominan plantas espinosas. En altitudes mayores, se encuentran bosques de laurisilva y fayal-brezal.
Caudal de los ríos
Es la cantidad de agua que pasa por un punto de un río en un segundo. Se mide en m3/seg. Experimenta variaciones a lo largo del año.
Regimen de los ríos
Variaciones estacionales del caudal dependen de las precipitaciones. Regímenes nival, mixto y pluvial.
Cuencas hidrográficas
El territorio cuyas aguas vierten a un río principal y sus afluentes. Se separan por líneas divisorias.
Vertientes hidrográficas
Vertiente cantábrica, atlántica y mediterránea. Baleares y Canarias carecen de ríos, poseen arroyos o corrientes de agua.