1. Ciclo Hercínico
El Ciclo Hercínico (o Varisco), llamado así porque su estructura responde a la Orogenia Hercínica ocurrida en el Carbonífero. Esta orogenia deformó los materiales del Paleozoico. Anterior a esta orogenia, durante el Paleozoico hubo otra que no afectó a los materiales de la Península (O. Caledónico).
- Esta orogenia trajo consigo la formación de cadenas montañosas ya erosionadas o reincorporadas a otras alpinas más modernas (parte axial de los Pirineos…).
- Hay varias hipótesis de cuál fue el origen de esta cadena y se conoce peor que orógenos anteriores (Caledónico) porque queda enmascarado por la alpina posteriormente.
- En general se acepta que hubo un cierre por subducción de un océano que hasta el Carbonífero separaba los dos grandes continentes de Laurasia de Gondwana. Entre estos existía un microcontinente (Armórica) donde podríamos situar a la península.
- El cierre del Océano trajo consigo la colisión entre ambos macrocontinentes, quedando Armórica “comprimida entre ambos”.
- Este cierre produjo la formación de una Pangea (Pangea 2, según autores) al final del Carbonífero.
¿Qué podemos observar de esta orogenia en la Península?: Esta orogenia trajo consigo la formación del Macizo Ibérico y la cadena pirenaica, hoy denudados por los agentes erosivos y formando parte de otros orógenos alpinos.
El Macizo Ibérico (o Hespérico) es lo que en geografía se denomina la Meseta. Está constituido por materiales del Paleozoico de diferente litología (antes de la orogenia y durante gran parte del Paleozoico la región estuvo bajo el nivel del mar).
Se puede dividir al macizo en cinco zonas más o menos paralelas, que representan zonas con diferente grado de deformación:
- Zona Cantábrica.
- Zona Asturleonesa.
- Zona Centroibérica.
- Zona Ossa Morena.
- Zona Surportuguesa.
2. Ciclo Alpino
La Pangea 2 formada en el Carbonífero superior, comienza a disgregarse después de la orogenia Hercínica. La disgregación de esta Pangea 2 comienza ya en el Pérmico. La separación de las placas lleva consigo la formación del Océano Atlántico y la formación de otros mares por distensión.
A nivel mundial, las cadenas alpinas se distribuyen desde Asia a la Península Ibérica (del Himalaya a los Pirineos):
Localmente cinturón orogénico que va desde el estrecho de Gibraltar hasta Asia Menor. Fuente: Anguita, F. 1988 Sistema Alpino (hace 20 m.a.)
Dos ramas diferenciadas:
- Rama Alpina: con vergencias hacia Europa (Alpes, Cárpatos, Balcanes, Pirineos, Béticas…).
- Rama Dinárica: con vergencias hacia el continente Africano (Arco Egeo, Dinárides, Apeninos…).
- Las cadenas Alpinas son el resultado de diversos procesos de colisión entre las placas Euroasiática, Africana, India y Arábiga, que se han ido sucediendo en esta zona durante los últimos 100 m.a. (la mayoría en los últimos 30 m.a.).
- Evolución en el contexto de la Península Ibérica: la separación de Pangea produjo la formación de una serie de cuencas de tipo Rift como consecuencia de los movimientos distensivos.
En estas cuencas se fueron depositando materiales en facies continentales (y de plataforma) hasta el Jurásico cuando la sedimentación comenzó a ser verdaderamente marina. Estos materiales marinos también se depositaron durante el Cretácico.
Ya en el Cretácico Superior comienza el acercamiento entre las placas Africana y Euroasiáticas (entre ellos la placa Ibérica), cerrándose el mar de Tetis y colisionando ambos continentes.
- Este hecho lleva consigo la formación de las cadenas diferentes cadenas del ciclo alpino dentro de la península:
- PIRINEOS: por el choque (subducción) de la microplaca Ibérica con la placa Euroasiática.
- SISTEMA BÉTICO: Por deformación y plegamiento de los materiales depositados en el mar de Tethys y choque de la microplaca de Apulia.
- SISTEMA IBÉRICO: Por deformación intraplaca y plegamiento de la litosfera por compresión.
3. Cuencas Post-Alpinas
Una vez finalizados los esfuerzos compresivos del ciclo alpino, toda Europa y también la Península Ibérica se ven sometidos a esfuerzos distensivos, formándose nuevamente cuencas de tipo rift desde el Rhin en Alemania hasta el Mediterráneo.
Estas cuencas se sitúan alrededor de las cadenas formadas durante la orogenia Alpina y también en su interior.
En la península Ibérica aparecen tanto cuencas sedimentarias intramontañosas y cuencas de rift.
Cuencas Intramontañosas
Se trata de depresiones de tipo horst y graben (fosas y horst). En las depresiones se depositan materiales sedimentarios provenientes de los relieves circundantes. En función de su situación se distinguen:
- Cuencas de antepaís.
- Cuencas interiores.
Cuencas de antepaís: su formación está relacionada con la formación de las cadenas a cuyos “pies” se sitúan.
- Cuenca del EBRO: Cuenca de antepaís al sur de los Pirineos. Su relleno es de materiales continentales de edad Paleógeno y Mioceno, prácticamente sin deformación.
- Cuenca del GUADALQUIVIR: Cuenca de antepaís al norte de la cordillera bética. Esta cuenca fue invadida por el mar durante el Mioceno hasta parte del Cuaternario. Por tanto los materiales de relleno son en su mayoría de tipo marino.
Cuencas interiores: Su formación está relacionada con la deformación alpina que afectan a zonas del macizo ibérico (materiales hercínicos). Principalmente la deformación alpina produce un hundimiento en determinadas zonas del macizo. Durante el Terciario, estas cuencas se ven rellenadas por materiales de esta edad que permanecen sin sufrir deformación.
- Cuenca del DUERO.
- Cuenca del TAJO.
Cuencas de Tipo Rift
Son depresiones más o menos alargadas como consecuencia de la distensión post-alpina. En la península se localizan hacia el Este. En función de su situación se diferencian:
- Interiores: Cuencas de Urgel-Cerdaña en los Pirineos y la de Calatayud-Teruel-Alfambra en la Cordillera Ibérica. Los materiales de relleno son continentales.
- Costeras: Cuencas del Vallés-Penedés-Olot en Cataluña; Valencia-Castellón en el Maestrazgo; Murcia y Almería en la cordillera Béticas etc. Los materiales de relleno son predominantemente marinos.