3.2. Los elementos climáticos y su distribución espacial Los elementos del clima son los componentes observables y medibles de la atmósfera. Los más importantes son la insolación, la nubosidad, la temperatura, la humedad, la presión, el viento, las precipitaciones, la evaporación, la evapotranspiración y la aridez. Todos ellos pueden presentar grandes variaciones en función de la influencia de los factores del clima. 1. INSOLACIÓN Y NUBOSIDAD · La insolación es la cantidad de radiación solar recibida por la superficie terrestre. · La nubosidad es el estado de la atmósfera en el que el cielo aparece cubierto de nubes, en mayor o menor grado. 2. LA TEMPERATURA La temperatura es el grado de calor del aire.
Se mide en grados centígrados (°C) con el termómetro. En los mapas se representa mediante isotermas o líneas que unen los puntos con igual temperatura. Aspectos Importantes de las temperaturas en relación con el clima son la amplitud térmica anual y las heladas. · La amplitud térmica anual es la diferencia entre la temperatura media del mes más cálido y la del mes más frío · Las heladas se producen cuando la temperatura del aire baja de 0 °C. Entonces, el agua que contiene se congela y se deposita en forma de hielo sobre la superficie. Pueden ser heladas de irradiación producidas por el enfriamiento del suelo en noches despejadas que se transmite al aire que está en contacto con él, o pueden ser heladas de advección producidas por la llegada de una masa de aire muy fría. 3. LA HUMEDAD, LA NIEBLA Y LA CALIMA · La humedad del aire es la cantidad de vapor de agua que contiene. Depende de la proximidad al mar y de la temperatura, pues disminuye cuando aumenta la temperatura. · La niebla es la suspensión de diminutas gotas de agua en la capa inferior de la atmósfera, que limitan la visibilidad a menos de un kilómetro. Se produce cuando el aire de la capa inferior de la atmósfera se enfría y se condensa. La niebla puede ser de irradiación, por pérdida nocturna de calor del suelo, propia del invierno, y de advección, por la llegada de masas de aire cálidas y húmedas sobre un suelo frío, o por la llegada de masas de aire frías sobre un suelo más cálido y muy húmedo, como el mar, un embalse, o un río. · La calima es una bruma seca que reduce la visibilidad. Está causada por la presencia de gran cantidad de finas partículas de polvo en las capas bajas de la atmósfera.
4. LA PRESIÓN Y EL VIENTO · La presión atmosférica depende de las carácterísticas de las masas de aire que se sitúan sobre España a lo largo del año. · Los vientos son movimientos horizontales del aire en relación con la superficie terrestre. Se producen a causa de las diferencias de presión y van desde las altas a las bajas presiones 5. LAS PRECIPITACIONES La precipitación es el agua que cae a la superficie terrestre procedente de las nubes, tanto en forma líquida como sólida. Se mide con el pluviómetro en milímetros (mm) o litros por metro cuadrado. En los mapas se representa mediante isoyetas o líneas que unen puntos de igual precipitación. Las causas que originan las precipitaciones son la elevación, el enfriamiento y la condensación del vapor de agua contenido en el aire. Según la causa de la elevación del aire, la precipitación puede ser orográfica (debida al relieve), convectiva (por el calentamiento del suelo) o de frente (al entrar en contacto dos masas de aire de carácterísticas distintas, la fría se introduce por debajo de la cálida, obligándola a ascender). · La latitud y la situación: determinan el predominio y la sucesión anual de borrascas o de anticiclones. · La apertura al mar: en las zonas aisladas de la influencia del mar, el frío del invierno favorece la formación de anticiclones y el calor del verano dificulta la condensación del aire, aunque puede provocar precipitaciones convectivas de carácter tormentoso. · El relieve: las precipitaciones aumentan con la altura y disminuyen en las zonas encerradas por montañas. 6. LA EVAPORACIÓN, LA EVAPOTRANSPIRACIÓN Y LA ARIDEZ · La evaporación es el proceso por el cual el agua se transforma en vapor a temperatura ambiente. La intensidad de la evaporación crece cuando aumenta la temperatura. Por tanto, se incrementa de norte a sur, en verano, y en las horas centrales del día. · La evapotranspiración es la pérdida de humedad de la superficie terrestre debida a la insolación y a la transpiración de las plantas y del suelo. La evapotranspiración real es la que se produce verdaderamente, y la evapotranspiración potencial -ETP-, la que se produciría en caso de haber una cantidad suficiente de agua. · La aridez es la insuficiencia de agua en el suelo y en la atmósfera. Depende de la relación que hay entre la precipitación y la temperatura. Así, es mayor cuanto menor es el volumen de precipitación y cuanto más alta es la temperatura.
3.3. Los factores climáticos y su distribución espacial Los factores son las variables que ejercen una influencia permanente e inalterable sobre el clima. Pueden agruparse en dos grandes conjuntos: factores geográficos y factores termodinámicos. 3.3.1. Factores geográficos Los factores geográficos que inciden sobre los climas españoles son la latitud, la situación, la influencia del mar y el relieve. · La latitud de España, en la zona templada del hemisferio norte, determina la existencia de dos estaciones bien marcadas, verano e invierno, separadas por dos de transición, primavera y otoño. En Canarias, por su latitud subtropical, próxima al trópico de Cáncer, los contrastes entre estaciones son menos notorios. · La situación de la Península, entre dos grandes masas de agua de carácterísticas térmicas distintas (el océano Atlántico y el mar Mediterráneo) y entre dos continentes (Europa y África), la convierte en lugar de encrucijada de masas de aire de propiedades distintas. Canarias recibe también influencias atmosféricas diferentes debido a su insularidad y a la proximidad a las costas africanas. · La influencia del mar es escasa en la Península, debido a su gran anchura, a sus costas poco recortadas, y a la existencia de relieves montañosos paralelos a la costa. Este hecho establece claras diferencias climáticas entre una estrecha periferia, abierta al mar, y un ancho núcleo de tierras interiores caracterizado por la continentalidad o ausencia de influencia marina. En cambio, en ambos archipiélagos, el influjo del mar es decisivo. · El relieve influye en el clima por su disposición, por su altitud y por su orientación. – La disposición del relieve peninsular tiene variadas repercusiones: o Los sistemas montañosos paralelos a la costa frenan la influencia del mar, que solo penetra con claridad por el valle del Guadalquivir. La posición oeste-este Las cuencas encerradas por montañas – La altitud disminuye las temperaturas unos 0,5/0,6 °C por cada 100 metros de ascenso. También provoca precipitaciones orográficas (en las laderas por las que asciende el aire, o de barlovento); precipitaciones «ocultas» (escarcha y rocío) y precipitaciones «horizontales» (por el estancamiento de las nubes en las laderas). – La orientación origina contrastes climáticos locales entre las solanas y las umbrías.
3.3.2. Factores termodinámicos Los factores termodinámicos del clima son los responsables de la circulación atmosférica o sucesión de masas de aire, que determina los distintos tipos de tiempo atmosférico y de clima. La circulación atmosférica está regida en altura por la corriente en chorro, y en superficie, por los centros de acción, las masas de aire y los frentes. 1. La circulación en altura: la corriente en chorro. En la zona templada en la que se sitúa España, la circulación atmosférica en altura está dirigida por la corriente en chorro o jet stream. Se trata de una fuerte corriente de viento, de estructura tubular, que circula en dirección oeste-este entre los nueve y los once kilómetros de altitud, en la diferencia de altura existente entre la tropopausa polar y la tropical. El chorro separa las bajas presiones presentes sobre el polo en altura, que quedan a la izquierda de su trayectoria, de las altas presiones tropicales, situadas a su derecha. La corriente en chorro es la responsable del tiempo en superficie. Este depende de las variaciones que experimenta la velocidad de la corriente y de sus desplazamientos estacionales: · La velocidad de la corriente es variable. Cuando circula rápido, a más de 150 km/h, tiene un trazado casi zonal (oeste-este), con suaves ondula dones, que corresponde en superficie con el frente polar y sus borrascas. · Los centros de acción son áreas de altas y bajas presiones. La presión atmosférica es el peso del aire sobre una unidad de superficie. Se mide en milibares (mb) con el barómetro y se representa en los mapas del tiempo mediante isobaras o líneas que unen puntos con la misma presión. En estos mapas, las isobaras van de 4 en 4 mb. La presión normal es de 1.013,5 mb, aunque en los mapas del tiempo suele considerarse un valor de 1.016 mb. – El origen de los centros de acción puede ser térmico o dinámico. Los centros de acción térmicos se forman por el enfriamiento o el calentamiento del aire. Un anticiclón térmico se forma cuando una masa de aire se enfría: el aire frío pesa más, desciende y ejerce una alta presión. Una baja térmica se forma cuando el aire se calienta: el aire caliente pesa menos, se eleva y ejerce una baja presión. Los centros de acción dinámicos se forman a partir de las crestas y vaguadas de la corriente en chorro, que se reflejan en superficie: las crestas generan anticiclones, y las vaguadas, borrascas.
3.1. Caracterización general del clima en España. Los condicionantes básicos. Los fundamentos de la diversidad climática española. El clima de España es muy variado debido a su posición latitudinal, su situación de encrucijada y el relieve. La Península Ibérica pertenece a las áreas templadas del hemisferio norte, por tanto con estaciones marcadas y afectada por el Frente Polar. Sometida según las estaciones preferentemente a las influencias de aire cálido y de aire frío. España presenta una gran diversidad de tiempo atmosférico y de climas, como resultado de la combinación de un amplio número de factores y elementos climáticos. Sin embargo, hay una serie de rasgos generales: • Hay una gran diferencia entre la franja situada al Norte y el resto de la península. La isoyeta de 800 litros divide la España seca de la húmeda. • Los relieves que circundan la meseta influyen en la mayor amplitud térmica del interior, al dificultarse la acción suavizadora del mar. • La altitud de la meseta hace que el interior tenga temperaturas medias inferiores a la las costeras. En las tierras del interior, los valores descienden de Poniente a Levante. • Enero suele ser el mes con la temperatura media más baja, mientras que Julio-Agosto son los meses con una temperatura media más alta. • Las temperaturas de las aguas del Mediterráneo son más altas que las del Cantábrico y el Atlántico (5°C aproximadamente). • La gama de amplitudes térmicas es muy extensa, desde el interior de la Meseta, donde se alcanzan los 20°C, en torno a 10°C en los climas oceánicos, 15°C en los mediterráneos litorales, hasta las islas Canarias donde la amplitud puede ser de 5°C. Las islas Canarias, aún dentro de la zona templada, se hallan cerca de trópico de Cáncer, teniendo un clima de tipo subtropical.
Con una amplitud térmica débil y una temperatura media algo más alta.
Clima seco por la influencia de la masa de aire sahariana. La variedad climática tiene como origen, principalmente, los factores. Estos se clasifican generalmente en tres grupos: astronómicos, geográficos y meteorológicos. Los primeros resultan de los movimientos de la Tierra y de la inclinación de su eje. La latitud sería el más significativo. Los segundos tienen que ver con las carácterísticas concretas del espacio físico en el que actúan, destacan, la situación entre dos grandes masas de agua con carácterísticas térmicas diferentes, la influencia del mar, la continentalidad y sobre todo el relieve (altitud, disposición del relieve y orientación). Por último, los meteorólogos hacen referencia a los movimientos de la atmósfera en sus distintos niveles. La circulación atmosférica en las capas altas (el Jet-Stream), o los centros de acción, las masas de aire y los frentes, en las capas bajas o superficie. La combinación de estos factores y su influencia sobre los elementos del clima van a dar lugar a la gran complejidad de dominios climáticos que nos podemos encontrar en España.
Amplitud térmica u oscilación térmica: diferencia entre las temperaturas máximas y mínima anuales. Si hiciéramos referencia a las diarias hablaríamos de amplitud térmica diaria. En España oscilan de los 8º del clima oceánico a las 20º del mediterráneo continental. Anticiclón: Centro de acción con presión atmosférica alta (superior a 1013 milibares, que es la presión media a nivel del mar). En ellos las masas de aire descienden y, en el hemisferio norte, se mueven en el sentido de las agujas del reloj, generando un tiempo estable. Pueden tener un origen dinámico (como el anticiclón de las Azores, que afecta a la península ibérica en verano) o térmico (como el anticiclón eurosiberiano, que afecta a la península ibérica en invierno). Aridez: Situación resultante de la falta de agua por la insuficiencia de las precipitaciones. Está en relación con las necesidades de la vegetación y el régimen térmico (a mayor temperatura, mayor aridez). En España, las zonas de mayor aridez se encuentran en el sureste de la península y en la parte oriental del archipiélago canario. Los índices de aridez se establecen en función de las temperaturas medias, las precipitaciones y, a veces, de la evaporación observada. Barlovento: Ladera o vertiente orientada hacia el lugar de procedencia del viento. Borrasca: Centro de acción con baja presión atmosférica (inferior a los 1013 milibares, que es la presión media a nivel del mar). En ellas el aire asciende y, en el hemisferio norte, se mueve en sentido contrario a las agujas del reloj, lo que genera nubosidad, precipitaciones y, por tanto, tiempo inestable. Pueden tener un origen dinámico (como la borrasca de Islandia) o térmico (por ejemplo las depresiones estivales del norte de África). Brisas litorales: Vientos suaves de carácter local generados por las diferencias térmicas que se establecen entre la tierra y el mar. Clima: Sucesión habitual de los estados atmosféricos o tipos de tiempo en un lugar o regíón determinada durante un periodo temporal amplio. Supone un análisis estadístico de distintas variables atmosféricas (temperaturas y precipitación, entre otras) recopiladas durante periodos de al menos 30 años. La climatología es la ciencia que estudia el clima. Continentalidad: Conjunto de carácterísticas climáticas propias de las áreas alejadas de la influencia del mar. Las más destacadas son el aumento de la amplitud térmica intraanual y la disminución de las precipitaciones. La zona de la península ibérica de mayor continentalidad es La Mancha.
Sotavento: Ladera o vertiente resguardada del lugar de procedencia del viento. Temperatura: Grado de calor que posee el aire en un momento y lugar determinado. Depende de factores como la insolación, la latitud o la altitud. Varios son los registros que interesan, tanto en lo que se refiere a las medias (absolutas, de las mínimas o de las máximas) como a los valores extremos (mínimos y máximos), ya sean diarios, mensuales o anuales. Se mide en grados centígrados con el termómetro. Tiempo atmosférico: Estado físico de la atmósfera en un momento preciso y en un lugar determinado. Se define por los valores de elementos como la temperatura, la humedad y la precipitación, el viento, la presión o la insolación, entre otros. La meteorología es la ciencia que estudia el tiempo atmosférico. Umbría: Vertiente de una montaña donde casi siempre hace sombra. Precipitaciones: Cantidad de agua, en forma de lluvia, nieve o granizo, que cae en un lugar. Se mide con el pluviómetro, en litros por metro cuadrado o milímetros. Presión atmosférica: Fuerza que ejerce el aire atmosférico por unidad de área sobre la superficie terrestre Régimen pluviométrico: Variaciones u oscilaciones de las precipitaciones a lo largo de un año. Régimen térmico: Variaciones u oscilaciones de las temperaturas a lo largo de un periodo de tiempo. Solana: Vertiente de una montaña que recibe los rayos del sol plenamente. Solsticio: es el momento del año en el que el Sol alcanza su mayor o menor altura aparente en el cielo, y la duración del día o de la noche son las máximas del año, respectivamente. Humedad atmosférica: Cantidad de vapor de agua existente en la atmósfera. Humedad relativa: Porcentaje de vapor de agua que contiene el aire en relación con el que contendría si estuviese saturado. Isobaras: Línea imaginaria en un mapa que une todos los puntos con la misma presión atmosférica (medida en milibares-mbar- o hectopascales -hPa-). Isotermas: Línea imaginaria dibujada en un mapa que une todos los puntos que tienen la misma temperatura del aire. Isoyetas: Línea imaginaria dibujada en un mapa que une todos los puntos que tienen la misma precipitación en un periodo de tiempo.